Es el artista top. El que más entradas corta. El que más discos vende. El que es seguido por miles y miles de fans cante donde cante y a la hora que sea. Y nada de esto es producto de la casualidad.
Cerrando la tercera noche del Encuentro de Colectividades, Abel Pintos volvió a ser ese duende etéreo que desde el escenario regala canciones, poesía y encanto. Con un show que había prometido distinto (y cumplió), pero con la misma empatía de siempre con su público que -fiel- lo esperó desde temprano, acompañó todas y cada una de sus canciones y lo despidió entre alaridos, aplausos y ovaciones.
Un gran artista volvió a pasar por el escenario mayor de la fiesta mayor de la ciudad, enamoró, cautivó y volvió a dejar bien sentado su prestigio de ser el «artista récord» de Colectividades.
Eran pasadas las 3 y media de la mañana cuando una multitud de más de 30 mil personas dejaban el predio, saciadas de tanta voz, de tanta canción, de tanto encanto…
