Javier Milei habló ante sus seguidores, ávidos de escuchar definiciones del recientemente electo presidente de los argentinos.
En su discurso, si bien no entró en definiciones profundas ni en la letra chica de lo que podrá ser su acción de gobierno, dejó varias definiciones que bien vale tener en cuenta.
«Hoy comienza la reconstrucción de Argentina», inició diciendo Milei. «Hoy empezamos a dar vuelta la página de nuestra historia. Se termina el modelo empobrecedor del estado omnipresente», agregó.
Por otra parte, el dirigente electo fue tajante en algunos otros conceptos. «Seremos un gobierno que cumpla a rajatabla lo que ha prometido», para luego volver al consabido discurso de campaña. «Basta del modelo empobrecedor de la casta. Volvemos a abrazar el modelo de la libertad para volver a ser una potencia mundial».
Se aventuró a decir que «Sabemos que hay gente que se va a resistir. A ellos quiero decirles: dentro de la ley todo, fuera de la ley, nada. En esta nueva Argentina no hay lugar para los violentos», en un mensaje que pareció dirigido a los gremios y sectores sociales organizados.
Por otra parte, Javier Milei bajó una línea clara a la hora de pronosticar lo que tiene pensado de su acción de gobierno: «No hay lugar para la tibieza, no hay lugar para mediastintas».
Además, y casi como una respuesta elíptica a lo expresado por Massa horas antes, expresó su deseo de «que el actual gobierno se haga cargo del mandato hasta el 10 del 12».
Sin dudas, Milei poco habrá de ir delineando su plan de gobierno en cuanto a los detalles. La misión más grande ahora, de cara al 10 de diciembre, será conformar un equipo de gobierno a la altura de las circunstancias.
«Se ha terminado una forma de hacer política y comienza otra», dijo casi al cierre de su discurso. «Dentro de 35 años volveremos a ser una potencia mundial», cerró el presidente electo.