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La Justicia federal autorizó a una familia a cultivar cannabis

La Justicia autorizó a una familia a cultivar cannabis

A través de un fallo realizado en  Río Negro, la Justicia habilitó el autocultivo de cannabis con fines medicinales para un pequeño con síndrome de Tourette.

La jueza Mirta Filipuzzi hizo lugar al planteo de la familia de J. N, de siete años, para que puedan producir aceite de cannabis hasta que el Estado se los garantice.

«Se encuentra probado el peligro en la demora pues el Estado Nacional aún no ha podido garantizar a J. N. la provisión gratuita e ininterrumpida del tratamiento con aceite de cannabis prescripto, dado que se encuentra en proceso de implementación el Programa Nacional para el Estudio y la Investigación del Uso Medicinal de la Planta de Cannabis, sus derivados y tratamientos no convencionales, y la inscripción allí requerida demandará un proceso durante el cual J. no puede suspender su tratamiento. Todo ello nos convence de la procedencia del pedido provisorio de autocultivo», afirmó el fiscal Diego Iglesias, titular de la Procunar.

En 2017 se aprobó la ley para habilitar el uso medicinal de la marihuana, pero no se avanzó en la producción estatal y sólo se permite la importación para la epilepsia refractaria.

El fallo judicial incluye tanto a la madre del pequeño, como a los abuelos, quienes tomaron un rol preponderante en la producción artesanal del aceite. Gabriel Navarro, el abuelo, es médico y, a partir de la enfermedad de su nieto, comenzó a cursar el posgrado de Cannabis Medicinal en la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de La Plata.

El caso

El pequeño recibió el diagnóstico del síndrome de Tourette cuando tenía cinco años. Se trata de un trastorno del sistema nervioso caracterizado por movimientos repetitivos o sonidos no intencionados.

Le recetaron distintos medicamentos, pero como los síntomas fueron en aumento la familia decidió ir más allá de la medicina tradicional y conocieron el aceite de cannabis que al implementarlo, las mejorías en el chico fueron notorias.

El niño y su familia viven en la ciudad de San Antonio Oeste, en Río Negro. La presentación de la medida cautelar había sido acompañado por los legisladores provinciales Nicolás Rochas y Javier Iud.


Esta disposición se  podría convertir en el paraguas legal para aquellas personas que corren el riesgo de ser perseguidos por narcotráfico mientras buscan una mejor calidad de vida.

 

Fuente: La Nación

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