En las últimas horas fueron detenidas nueve personas que integrarían una banda paramilitar que operaba en distintas localidades de Córdoba, Mendoza, Buenos Aires y Santa Fe.
De acuerdo a las primeras informaciones, trascendió que uno de los detenidos tendría vínculos con el fallecido Mohamed Alí Seineldín, el militar de la ultra derecha nacionalista condenado por los alzamientos cara pintadas contra los gobiernos democráticos de Alfonsín, en 1988, y Carlos Menem, en 1990.De hecho, la organización desbaratada se autodenominaba «Compañía de Reserva Teniente Coronel Mohamed Alí Seineldín», según informó Canal 10.
El operativo incluyó más de 500 efectivos policiales -Provinciales, Gendarmería y Policía Aeroportuaria-. La investigación está a cargo del juez federal Sergio Pinto, de la localidad cordobesa de Bell Ville, quien reveló que la denuncia fue realizada por el Ejército Argentino tras una investigación llevada adelante por la División de Inteligencia Antiterrorista (DIA) dependiente de la D.G.I.C.
El juez Federal confirmó en declaraciones a la prensa que se trata de una especie de organización paramilitar dado el gran arsenal y armamento:
«El material secuestrado es importante porque hace a una estructura de un ejército entre los cuales se puede decir que hay armas de fuego de diferentes calibres, hay uniformes militares, credenciales, documentación, que sería apócrifa, hay insignias, chalecos antibalas, teléfonos celulares y hasta municiones”.
Según trascendió se secuestraron cascos, máscaras de gas, libros nazis, equipos tácticos y armamentos «propios de un ejército». Hasta el momento no se ha podido establecer cuál era el objetivo final de la organización. Mientras que el centro operativo de la banda estaba en Camilo Aldao, al sureste de Córdoba
La palabra del jefe del Ejército: Claudio Pasqualini
La autoridad se mostró sorprendida por el desbaratamiento que se llevó a cabo mediante 27 allanamientos en Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Buenos Aires, y dijo que al inicio de la investigación no se imaginaba la magnitud que tenía la organización.
«Ni nos imaginábamos que esto fuera a terminar de la forma cómo surgió en las noticias el día de hoy. Pensábamos que era algo mucho más acotado, menor y que no tenía la magnitud que vemos que tiene», admitió Pasqualini a Cadena 3.
El militar reveló que la denuncia inicial fue realizada por las fuerzas luego de que detectaran fotos de grupos con uniforme militar en las redes sociales.
«Esto surge hace un par de meses. Nos llega el conocimiento de una foto que estaba en las redes sociales en las cuales se veía gente con uniforme militar y nos causó extrañeza porque no eran miembros del Ejército», explicó.
«Se lo comenté al ministro Aguad y él me instruyó que haga la denuncia correspondiente», agregó, al tiempo que explicó que el Ejército no intervino en la investigación judicial.