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Caso Lázaro: identifican a un presunto cuarto agresor, también adolescente

Caso Lázaro: identifican a un presunto cuarto agresor, también adolescente

Revisaron las conexiones virtuales entre los presuntos atacantes y lograron nuevos resultados en la investigación. La víctima presenta leves mejorías en su cuadro clínico. AGNoticias dialogó con el papá de Lázaro, Fabián Rivarola.

Es un trabajo artesanal el que le tocó hacer a la fiscal Norma Scaglia, que se encuentra tomando testimonios, revisando filmaciones y las redes sociales que usan los adolescentes que el pasado domingo habrían protagonizado el ataque a Lázaro Rivarola de 13 años, en la plaza Jerónimo del Barco de barrio Alto Alberdi de la ciudad de Córdoba.

La fiscal le pidió a su equipo de colaboradores, un grupo de gente de su entera confianza que la asiste en las tareas investigativas, que no la abandonen en la dificultad.

Esa misma convicción volvió a dar sus frutos en las últimas horas de este viernes, cuando Scaglia completó todos los papeles de rigor para notificar a un cuarto chico, de 14 años, ya que habría protagonizado el episodio de violencia urbana en la plaza.

La figura que se le atribuye es por “lesiones leves”.

En la oficina de la fiscal del fuero penal juvenil entienden que estuvo involucrado en las agresiones contra A., el amigo de Lázaro que fue socorrido por un taxista que pasó alrededor de las 23 por la plaza, cuando una patota golpeaba a los chicos.

El taxista todavía no se presentó a declarar. La fiscal cree que su aporte puede ser importante.

La misma figura atribuida ahora al cuarto implicado está impresa en la ficha de otros dos chicos, también de 14, por agredir a A. Lo habrían emboscado. Lo venían buscando hacía varios días, creen los pesquisas.

Pero alguien fue más allá: se agachó, alzó un trozo suelto del cordón de la vereda y se lo arrojó a Lázaro.

El “ladrillo” impactó en el parietal derecho de la cabeza de la víctima.

Lo volteó instantáneamente.

El golpe le provocó un daño cerebral irreversible, a pesar de que su cuadro clínico presentó una leve mejoría en las últimas horas, según detalló el abogado que representa a la familia, Carlos Nayi, mientras el adolescente se recupera en la terapia intensiva del Hospital de Niños de la Santísima Trinidad.

El primero de los acusados y cómo sigue la investigación

Como responsable de la agresión, la fiscalía individualizó a un adolescente que se encuentra bajo resguardo de la Justicia en el Complejo Esperanza, ubicado en la localidad de Bouwer.

Al principio se lo tenía por un adolescente de 14. Sin embargo, otro de los resultados del acopio de información y del cruzamiento de datos en redes sociales y entre los testimonios registrados fue la presunción de que el acusado podría haber mentido en su edad.

Finalmente, este viernes se confirmó que tiene 15 años, según informaron cuerpos investigativos, y no 14 como había dicho el miércoles, cuando fue puesto bajo tutela judicial.

Sus padres se presentaron ante la fiscal y corroboraron que los primeros datos eran falsos, cosa que ya se presumía desde antes.

Y si bien la fiscal prefirió no dar mayores detalles, desde el entorno de Lázaro aseguraron que el presunto agresor habría abandonado la escuela inmediatamente después de la pandemia.

No estaría escolarizado y formaría parte de una “banda de chicos” que, aparentemente, se reunía en las cercanías de barrio Marechal, a pocas cuadras del lugar donde se produjeron los incidentes.

En fiscalía nadie pudo desmentir estos datos.

Por su parte, la familia del adolescente de 15 años nombró a un abogado defensor.

La palabra del papá de Lázaro, Fabián Rivarola

AGNoticias dialogó en exclusiva con el papá de Lázaro, Fabián Rivarola, quien comentó que en las últimas horas el adolescente presentó “una leve mejoría” por el cuadro que atraviesa y que «está evolucionando perfectamente de a poco».

Lo vi estable, bien. Está presentando mejorías muy leves, la está peleando y presentando batalla, contó su papá.

Por último, sobre el trabajo realizado por el personal médico del hospital, sostuvo: «La atención ha sido muy buena. La gente del hospital se portó muy bien. En ese aspecto, excelente el trabajo de todos los profesionales que están ahí«.

Una investigación en las redes sociales

Fuera de la calle, este ataque se venía cocinando desde hacía tiempo.

Aparentemente, A. era objeto de amenazas por una vieja disputa con la banda que habría corrido a Lázaro y sus dos amigos durante 10 cuadras de barrio Alto Alberdi, hasta tumbarlos al piso en la plaza Jerónimo del Barco, a escasos metros de la casa de la mamá del adolescente que reposa en el hospital.

Eso es lo que investiga la fiscalía. Pero no es tarea fácil.

Las imágenes de los domos encaminaron hacia las primeras pistas. Pero después hubo testimonios reveladores.

El secuestro de celulares también aportó rastros.

Y en las redes sociales los chicos dejaron sus huellas. Los pesquisas se zambulleron allí y fueron hallando hasta cuatro perfiles de un mismo chico, casi que por cada uno de los presuntos involucrados: “Carlos_M, Carlos12, CarX, QuiquitoCarlos”, ejemplifican los investigadores.

Allí comenzaron a surgir los comentarios entre ellos. Esos dichos los fueron situando, ante los ojos de los pesquisas, en la plaza y a la hora del ataque. Para colmo, algunos hasta hicieron comentarios sobre la pelea.

La fiscal lleva adelante estos pasos con cuidado, rigurosidad y también con algo de intuición, dicen sus laderos.

Hasta ahora dio resultados. Pero, sin hablar sobre su estrategia de investigación, Scaglia dice que aún le faltan datos precisos para individualizar a cada integrante de este grupo.

Tenemos identificados a cuatro, pero podrían ser 16 o más, dijo el viernes la fiscal.

Todos tienen menos de 16 años, que es la edad a partir de la cual la fiscal tiene injerencia. Por este motivo, la única medida de resguardo fue dictaminada por un juzgado de menores y no por Scaglia.

Los chicos son inimputables ante la ley penal. El Estado debe protegerlos y velar para que no se encuentren, otra vez, involucrados en este tipo de situaciones.

No obstante, en la fiscalía aún no descartan que pueda haber un adolescente o un joven mayor de 16 años involucrado.

Fuente: La Voz y AGNoticias

Imagen: Vía Córdoba

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