Si bien la riña de gallos están prohibidas por ley desde hace mucho tiempo, y las sociedades protectoras de animales las persiguen, eso no corre en nuestra ciudad.
Riña de gallos. Al menos eso parece si uno se basa en declaraciones casi callejeras que han cruzado en distintos ámbitos los abogados Federico Bossi y Daniel Villar.
Se los sabe enfrentados desde hace tiempo; los estrados judiciales y las portadas noticiosas en reiteradas oportunidades los han visto ponerse cara a cara. Por lo que éste vendría a ser un nuevo round en esta riña de gallos.
No hay que perder de vista el escenario. Que en este caso no es un callejón oscuro. En medio de toda esta discusión y cruce de municiones de grueso calibre, está un dictamen del Asesor Letrado Daniel Villar, a partir del cual la empresa Control Z (representada por el mismo dueño del medio radial en que habló Bossi), sale perjudicada en sus intenciones de cobrar un dinero que reclama por el Festival Peperina que no se realizó.
Cuidado con los picotazos
Hoy, en un medio radial de la ciudad, el abogado Federico Bossi cargó contra su archienemigo Villar. Dijo: «La figura de Villar está totalmente sobrevalorada, sobreestimada. Es una autoridad, si se quiere, de tercer orden. Es un cargo absolutamente técnico. Villar no puede decirle al Intendente lo que tiene que hacer, no tiene la autoridad para hacerlo. El es un funcionario de cuarto orden que a raíz de una exposición mediática busca tener una cierta trascendencia».
Pero el otro abogado en cuestión, Daniel Villar no le fue en zaga: «Lo que tendría que mencionar Bossi, es si está actuando de abogado de quien resultó incumplidor de las obligaciones contractuales, o simplemente es un barra brava que alienta la desquiciada campaña en contra de un funcionario. Un funcionario que hizo prevalecer los intereses de los vecinos y fondos de municipio ante la voraz pretensión del productor de cobrar por lo que no hizo».
Algo nos hace presagiar que éste no será el último viernes de riñas de gallo en la ciudad…
