Durante la tarde y noche del viernes, la presencia policial en inmediaciones de la calle Rawson fue frecuente, existiendo versiones cruzadas sobre lo sucedido.
Mientras que desde la Policía se informó sobre una riña y una posterior resistencia hacia el personal actuante, algunos vecinos indican que existió abuso policial y otros incluso hablan de un hecho de violencia familiar.
Lo cierto y concreto es que en la noche del viernes 1 de mayo, efectivos policiales procedieron con la detención de dos sujetos. Esto fue después, según el relato de la Policía, de que vecinos protagonizaran una riña, que incluyó disturbios y pedradas contra el personal actuante y las unidades móviles.
A su vez, y según testimonios de vecinos, dicho operativo se caracterizó por la presencia de varios móviles; habiendo existido abuso por parte de los policías y escuchándose disparos.
Denuncia de un hecho de violencia familiar
Por otra parte, un restante grupo de vecinos de dónde ocurrieron los hechos, afirma que no hubo abuso policial; y más bien denuncia un hecho de violencia familiar y de género; el cual habría sucedido en el mientras tanto del operativo policial, que tuvo lugar en la jornada del viernes.
Particularmente lo que se denuncia, es que, las dos personas aprehendidas -dos sujetos de 32 y 23 años de edad-, antes de ser retenidas por el personal policial habían ingresado a la casa de una vecina; golpeando luego a la misma y a una menor de edad. A su vez, y siguiendo el relato de este grupo de vecinos, los sujetos llevaban consigo un arma de fuego y un cuchillo.
El hecho en cuestión tuvo lugar en el mientras tanto del «ida y vuelta» de los móviles policiales; ya que según el relato de la Policía, fueron comisionados al lugar en más de una ocasión. De hecho, los vecinos indican que se hicieron presentes un total de tres veces; teniendo los hechos, su origen, en una discusión.
En definitiva, lo que en principio fue una discusión entre vecinos, por motivos desconocidos, tuvo como resultado diversas consecuencias: la presencia policial y la aprehensión de dos personas; disturbios que incluyeron lanzamientos de piedras y daño de móviles; dichos que indican que existió abuso por parte de los efectivos; y una denuncia de un hecho de violencia familiar y de género. El interrogante continúa abierto y las versiones cruzadas son las pruebas.
