Bruno tiene 8 años y dejó de jugar al fútbol con sus amigos de «Vecinos Unidos», su club de Florencio Varela, porque le diagnosticaron leucemia y tenía que comenzar el tratamiento.
Bruno Badiali, un niño que padece leucemia, no pudo participar en los últimos partidos de fútbol de su equipo «Vecinos Unidos» de Florencio Varela. Fue diagnosticado con leucemia y debió comenzar el tratamiento. Sin embargo, acompañó a sus compañeros desde afuera, alentándolos en cada encuentro.
Hace poco, el equipo salió campeón y lo primero que hicieron sus amigos fue llevar la copa a la casa de Bruno para que él también pudiera levantarla. Además, lo sorprendieron con globos y lo arengaron al grito de «¡Bruno campeón!».
Gestos como ese y el apoyo de su familia son el combustible que motiva a Bruno a seguir adelante con el objetivo de volver a las canchas a jugar con sus amigos.
Gonzalo, su padre, relató cómo comenzó todo: «Un domingo, Bruno se sentía mal y tenía unos puntitos en la panza. Decidimos llevarlo a la guardia, y tras varios estudios, le diagnosticaron leucemia linfoblástica aguda T».
El tratamiento de quimioterapia obligó a Bruno a dejar el colegio y el fútbol. Gonzalo destacó el papel de Mateo, su hermano menor, quien se convirtió en su donante de médula: «Mateo fue el donante. Al principio, nos dijeron que la médula se puede encontrar en la familia, y así fue».
Tras un proceso de recuperación, Gonzalo comparte que Bruno ya no tiene células malas en su cuerpo y se prepara para un trasplante.
Sobre el emocionante momento con sus compañeros de equipo, el padre de Bruno compartió: «El profe me llamó y me dijo que saliéramos a la puerta porque querían darnos una sorpresa».
Bruno, emocionado, contó: «Yo sentía que iban a traer la copa, pero no me esperaba que venga todo el equipo». Bruno juega de mediocampista, admira a Cristiano Ronaldo y sueña con volver a jugar al fútbol el próximo año.
Fuente: Cadena 3
