Desde «Siempre a las 10» dialogamos con Gladys, que junto a un grupo de personas voluntariosas, llevan adelante el merendero «A todo corazón». Entre otras cosas, el merendero recoleta donaciones de útiles escolares ante el comienzo de clases.
En el corazón de Barrio Parque San Juan, en la calle 10 al fondo, se encuentra el merendero «A Puro Corazón», un espacio que ha pasado de alimentar a 42 niños el año pasado a atender a un número de 50 pequeños en la actualidad. Gladys, la valiente mujer detrás de este noble proyecto, nos contó más sobre su labor y las necesidades que enfrentan diariamente.
Gladys, madre de familia, nos cuenta que la decisión de abrir el merendero fue personal, motivada por las experiencias vividas y su profundo deseo de marcar la diferencia en la vida de los niños y adolescentes del barrio. Aunque los recursos son limitados, la solidaridad y el apoyo, en especial de la fiambrería Elena, han permitido que el merendero no solo siga funcionando, sino que haya crecido en su capacidad para ayudar.
«Estoy agradecida de corazón, son unos genios totales. Para esto, hay que tener corazón, pero al final ves la felicidad de los niños», comparte Gladys. En el merendero, se proporciona leche, alimentos no perecederos, fideos y cualquier ayuda que Gladys pueda brindar a las familias necesitadas. A menudo, este lugar se convierte en la única fuente de comida diaria para algunos niños, especialmente aquellos cuyas madres solteras luchan por conseguir lo justo para el día.
Además de la alimentación diaria, el merendero «A Puro Corazón» se involucra activamente en iniciativas solidarias. Actualmente, están llevando a cabo una colecta de útiles escolares, aceptando donaciones de mochilas y cartucheras, usadas pero en buenas condiciones, para garantizar que otros niños puedan tener acceso a la educación de manera adecuada.
Gladys agradece la colaboración de la comunidad y destaca la importancia de sentir la realidad de quienes menos tienen. «Esto lo tenés que sentir», expresa con emoción.
El equipo del merendero no solo está formado por Gladys, sino también por sus hijas y amigas solidarias: Larisa, Angelica y Samara, quienes trabajan incansablemente para hacer posible este proyecto altruista.
Si querés contribuir o necesitás más información sobre cómo ayudar al merendero «A Puro Corazón», puedes contactarlos directamente en la calle 10 al fondo, reconocible por ser la única lona verde en la calle. También puedes comunicarte al número de teléfono 3547638780 o seguirlos en Instagram a través de @merenderoatodocorazona.g.
