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La historia de Barby: La altagraciense que triunfa en el mundo del modelaje internacional

La historia de Barby: La altagarciense que triunfa en el mundo del modelaje internacional

En esta sección te invitamos a conocer las historias de aquellos altagracienses viviendo en diferentes partes del mundo. Hoy dialogamos con Bárbara (Barby) quien hace casi un año recorre las pasarelas de todo el mundo y trabaja con una diversidad de marcas. Hasta el momento estuvo en Turquía, India y actualmente se encuentra en Italia. En la nota la joven nos comparte esta grandioso sueño y experiencia.

En AG Noticias la sección «Altagracienses por el Mundo» ya es un clásico de nuestro portal informativo. Un espacio dónde les acercamos los lectores historias de vecinos, amigos o familiares que dejaron su ciudad natal y que ahora están viviendo diferentes experiencias alrededor del mundo. En esta oportunidad, conocemos más a la altagraciense Bárbara (Barby) Menefoglio.

Barby transitó su niñez y escolarización en Alta Gracia. Pero siempre tuvo presente un sueño: el de salir a explorar el mundo, conocer diferentes culturas, personas y lugares para poder salir de su zona de confort. Todo comenzó desde que era muy pequeña, por ende fue un deseo interno que siempre estuvo ahí presente.

La historia de Barby: La altagraciense que triunfa en el mundo del modelaje internacional

«Mis papás han viajado mucho, y han vivido varios años en Europa, desde chica me han inculcado que tengo que conocer el mundo. A mis 14 años, para mis 15 elegí irme de viaje a Europa. Viajé con mi papá y conocí un montón de países, mis raíces en Italia y lugares donde habían vivido mis papás; eso me abrió mucho la mente. Me enamoré de Europa y reafirmé mi idea de querer viajar y seguir conociendo el mundo».

Hace ya casi un año que está recorriendo el mundo y debido a su profesión como modelo, no se encuentra en un lugar fijo. Vivó tres meses en Turquía (Estambul) y casi seis meses en India: 3 fueron en Nueva Delhi y los 3 restantes en Bangalore. Actualmente reside hace tres meses en Italia, en un pueblito cerca de Milán.

Su trabajo como modelo

La joven inició su profesión como modelo desde que era adolescente, para ser más precisos, a los 17 años de edad. No obstante, antes de eso, no le llamaba para nada la atención todo lo que rodea a este mundo. Aunque siempre desde que era muy chica la gente le decía que lo hiciera porque era muy alta y delgada.

Hasta que un día su cabeza hizo un click y pensó por qué no probar. Es así que comenzó primero con un curso en Córdoba Capital y en ese mismo instantes, al desfilar, sintió que era algo que había hecho toda la vida. «Sentí una confianza y actitud que no había sentido antes».

Al mes de empezar, la escuela de modelaje la llamó para trabajar y realizó su primer desfile de vestidos de novia, con una marca muy famosa de España. «Desde ahí siempre hice desfiles en Shoppings, aperturas de temporada en Carlos Paz, Santa Rosa de Calamuchita y producciones de fotos en Córdoba Capital».

No fue hasta después de la pandemia que pensó en la oportunidad de ser modelo internacional, ya que se correspondía perfectamente a lo que ella aspiraba: hacer algo que de verdad le gustaba y recorrer el mundo.

«Siempre fui muy soñadora desde muy chica y tengo la confianza de que puedo lograr todo lo que me proponga. Obviamente agradezco también a la familia que me tocó porque me apoyaron en todo lo que quise hacer sin dudarlo. Eso fue muy importante para mí».

De esta manera, se puso manos a la obra para buscar agencias en Buenos Aires que trabajaran en el exterior. Envío el respectivo material y a los dos meses obtuvo una respuesta. En la misma le solicitaban que viajara para poder firmar el contrato y en esas dos semanas, trabajó desfilando para la «Jaula de la Moda» en el Canal 13. «Fue una experiencia muy linda salir en la tele, conocer el canal, y ver famosos».

La suerte fue tal que al regresar a Alta Gracia, al mes y medio le comunicaron que una Agencia de Modelos estaba muy interesada en ella. «Acepté después de analizar bien todo. Nunca me hubiera imaginado empezar mi carrera como modelo internacional en Turquía, porque no era un destino tan común. Mi mamá había estado allí y se había enamorado de Estambul. Eso fue algo que también me dio confianza. Eso es lo hermoso que tiene la vida, que te llena de sorpresas».

La pasión por el modelaje y los pros y contras de la industria

Barby explicó que su pasión por el modelaje se fue desarrollando poco a poco debido a que siempre le encantó ver a súper modelos desfilando transmitiendo tanta actitud y confianza. «El modelaje va mucho más allá de la belleza, no como muchos suelen pensar, es un arte en el que uno transmite, se parece muchas veces a la actuación. Hay que saber conectar con las personas y transmitir algo».

Asimismo agregó que esta profesión va mucho más allá de la belleza y no como muchos suelen pensar. «Es un arte en el que uno transmite, se parece muchas veces a la actuación. Hay que saber conectar con las personas y transmitir algo. Siempre me encantó esa adrenalina antes de salir a la pasarela para darlo todo. En el tema de las producciones de fotos fui aprendiendo sobre la marcha, hasta que sin darte cuenta generas tu propio estilo».

En cuanto a las ventajas que tiene, una de las principales que señala la joven es el hecho de poder viajar por el mundo. «Conocer lugares y culturas tan diferentes. También perfeccioné mucho el inglés y el italiano».

Otra de ellas es que se conoce a mucha gente todo el tiempo y es posible hacer diversos contactos. «Me encanta el hecho de trabajar siempre en lugares distintos con personas nuevas, es una profesión que te mantiene en movimiento y no deja que te acostumbres a nada».

Sin embargo la desventaja que tiene para ella es la exigencia que existe con las medidas. «Yo siempre priorizo mi salud y trabajo con las agencias que me aceptan tal cual soy». Al igual que otra desventaja, es aprender a vivir con el rechazo. «Es duro, pero termina siendo algo positivo. Las modelos vivimos haciendo castings y capaz que de 10 quedas en 1. A veces te dicen que no respetuosamente y otras veces no. Es ahí donde entra en juego mi gran fortaleza interna«.

«Aprendes a que, si te dicen que no, no es un problema tuyo, no hay nada malo en vos, simplemente no encajas con el perfil que ellos están buscando. Así como hay muchos otros trabajos en donde buscan tu perfil y sos perfecta para ellos».

¿Más sueños por cumplir?

Cuando se le preguntó si tiene otros sueños por cumplir, además de ser modelo, la altagraciense declaró que recién está arrancando en este mundo y que va muy bien encaminada. «Hace un par de meses firme contrato con una agencia en Holanda, que actualmente es la que me representa. Siempre busco progresar. En el mundo del modelaje las mayores oportunidades están en Europa y en Asia».

Y reflexionó lo siguiente: «Solo tengo 21 años y tengo una vida por delante. No descarto la posibilidad de dedicarme a otra profesión en un futuro, quizás el modelaje sea un puente para otra. Solo sé que estoy bien encaminada, voy detrás de mis sueños y abierta a recibir todo lo que el universo tenga para mi».

Experiencias en los países: lo que más le gustó y lo que menos

Para Barby, transitar por cada uno de estos países la dejó marcada por algo muy especial. Lo que rescata de todos ellos es el hecho de estar conociendo todo el tiempo a gente de muchas culturas y hacer un montón de amigos. «Al tener roommates siempre generas lazos fuertes. Es muy lindo conocer culturas tan diferentes y aprender a respetarlas. Te vas adaptando a nuevas situaciones todo el tiempo tratándole de ver el lado positivo».

A continuación indicó que siempre le gustó salir a a recorrer los lugares donde se encuentra. «Puedo hacerlo sola, soy muy independiente en ese sentido y no tengo miedo».

Aunque con todo lo bueno, viene lo malo. Un domingo en Estambul, ella salió sola a dar una vuelta y observó con sus propios ojos un atentado.

«Fue la única vez que sentí muchísimo miedo. Ocurrió obre la calle Istiklal que es una famosa calle peatonal muy turística, larguísima, llena de negocios y restaurantes de todo tipo. En un momento se puso complicado y nos encerraron a todos dentro de los negocios por seguridad. Este estaba a cinco cuadras de donde había sido el atentado».

Turquía

De Turquía contó que se encontraba en una zona muy linda donde le encantaba salir a caminar. «Todos los días teníamos un montón de castings, así que recorríamos toda Estambul. Hay un montón de lugares para conocer, muchas comidas para probar y mucha historia».

Con respecto al idioma, aseveró que no todos ellos hablan inglés pero se hacen entender. «En el trabajo por lo menos siempre había uno que sabía hablar, así que no era un problema».

Regresaldo al tema de la seguridad, la joven sostuvo que afortunadamente nunca le ocurrió nada estando sola pero si evitaba caminar sobre todo de noche. «Si era un poco incómodo a veces estar sola en lugares donde había mucha gente, sobre todo hombres, me acuerdo cuando fui la segunda vez al Grand bazar sola y la verdad que me pegué la vuelta».

Otros datos interesantes que rescata de este país tan alejado al nuestro es que los turcos son muy serviciales y donde vayas te ofrecen té. «Además les encanta vender y regatear. El tráfico es bastante desordenado, pero es una maravilla comparándolo con el de India».

India

Luego al llegar a India, se topó con un cambio cultural muy grande. «Al principio me costó adaptarme, pero después me acostumbré. Veía que los indios son muy nacionalistas al igual que en Turquía».

La altagraciense en ese tiempo vivió en Nueva Delhi que es su capital y Bangalore. «Bangalore es la ciudad más tecnológica de la India, donde hay cientos de empresas importantes a las que van a trabajar personas de todo el mundo».

Sobre el idioma relató que en India hay como 11 idiomas diferentes. «Como fue una colonia británica casi todos hablan inglés. En Nueva Delhi hablaban en hindi, en Bangalore en Canarés y entre ellos no se entendían, ni siquiera son parecidos».

La comida, es otro factor importante a la hora de vivir en otro país. «Probé de todo, pero a mí no me gusta el picante, y acá le ponen picante hasta al té. Lo bueno y que amaba, es que hay aplicaciones de delivery de supermercado que te llevaban todo en 7 minutos. En el supermercado los precios están impresos en los productos, viniendo de la Argentina era algo que no me imaginaba».

Como extranjera ella confirmó que la trataron como una celebridad. Algo muy común que un turista debe esperar que ocurra cuando va a la India. «Siempre te piden fotos. En todos los lugares turísticos la gente hacía cola para sacarse fotos con nosotras. También a la gente de allá les gusta mucho celebrar y hacer fiestas. Las personas de mucha plata vivía haciendo fiestas en sus casas. Son muy serviciales».

Asimismo comentó que el tránsito es un caos debido a que en India casi no hay veredas. «Pasan las motos por todos lados, es muy estresante y peligroso si tenés que caminar. Por eso siempre yo usaba los ‘tuc tucs’ para las distancias más cortas, aunque fuesen 600 metros».

«Lo triste es ver tanta pobreza todo el tiempo, siempre se te acercan niños a pedirte cosas, comida, sobre todo. Me acostumbré a llevar siempre en el bolso paquetes de galletitas para darle a los chicos. Hay mucho contraste de clases sociales, hay gente extremadamente pobre como rica. Veía de todo en las rutas, autos de alta Gama, motos y vacas que se cruzaban».

Italia

Finalmente arribó a Italia que es donde se encuentra hoy en día. Lugar en el mundo en el que Barby siente una gran conexión ya que es como su segundo hogar. «Es la tercera vez que vengo y hace 3 meses que estoy viviendo en Italia. El hecho de estar bastante tiempo en un lugar te hace ver las cosas más profundamente».

«No es lo mismo venir de vacaciones 2 semanas o 1 mes, a que estar con la gente día a día, conociendo sus costumbres, viendo cómo viven, como piensan».

Si hablamos de lo material, este país lo tiene todo. «No es como en Argentina, no importa que trabajo hagas, mientras trabajes siempre podés tener un buen estilo de vida. En comparación a la Argentina que por ahí incluso trabajando mucho no se puede llegar al mismo nivel».

Una de las cosas más la maravilló fue poder conocer la historia de este país. «Hace poquito fui a Roma por segunda vez y me quedé enamorada como si fuera la primera. Tiene eso único que no lo tiene ninguna otra parte del mundo».

Experiencias que la marcaron

Cuando viajamos a otro lugar ubicado en otro punto del planeta lo hacemos solos y eso a veces nos juega una mala pasada. «No es fácil el hecho de estar sola. Por suerte soy una persona muy independiente pero igual a veces se siente la soledad».

No obstante, la fuerza de la joven nació de esto mismo. «Esto es lo que te hace fuerte. Salir de tu zona de confort e ir detrás de tus sueños te da una satisfaccion enorme. Siempre hay que hacer sacrificios, nada es fácil, pero vale la pena. Como lo mencioné anteriormente, la fuerza interior para lidiar con el rechazó también me ha hecho crecer mucho».

Un nuevo destino nos hace crecer muy rápido como personas y permite que vayamos superando nuestros miedos. «Hay cosas que no son tan graves como pensamos. Cuando me fui de Argentina, cumplí mis 21 años en el avión y llegué a destino en mi cumpleaños. Creo que fue la primera prueba de estar bien conmigo misma. Hice el salto de vivir con mi familia a estar completamente sola».

Igualmente, Barby señaló que se sintió muy cómoda en Turquía, India e Italia. «Ellos aman a los argentinos y se interesaban por mi cultura y me lo nombraban siempre a Messi. En Italia hice muchas amigas y siempre la gente fue muy buena onda. Incluso escuchan mucha música argentina, lo que me sorprendió. Hasta habían visto series argentinas que aman».

«Creo que la discriminación que muchos hablan ha quedado en las generaciones más grandes, siento que los jóvenes de ahora están más abiertos a la idea de conocer gente de diferentes culturas e interesarse por ellas».

Reflexión final y consejos para aquellos que se quieran animar a vivir en otro país

Por otra parte, la altagraciense aconsejó que aquellos que están pensando en viajar, se animen y no tengan miedo. «Es una experiencia que pienso que todas las personas deberían pasar. Te abre tanto la cabeza, aprendés y conocés muchísimo, te das cuenta que hay un mundo gigantesco fuera de esa cajita en la que vivimos cada uno en su ciudad o pueblo».

Además manifestó que el que quiere conocer el mundo y no tiene tanto dinero puede hacerlo. «Hay un montón de opciones como los voluntariados que también podés aprovechar por lo menos para empezar y seguir viendo que se te presenta».

Inclusó recomendó que aquel que tenga la posibilidad de de hacer la ciudadanía en cualquier lado de Europa que la haga. «Porque es impresionante como se te abren las puertas por ser ‘europeo’, lamentablemente como argentinos la realidad es que tenemos menos posibilidades».

¿Volver a Argentina?

Toda persona que emprende un viaje para irse a vivir a otro país lejano y ajeno, lleva consigo en su memoria los recuerdos de los seres queridos que dejó atrás. Barby aseguró que extraña demasiado a su familia y amigos.

«Lo que más extraño en Argentina es a mi familia y amigos. Los argentinos en general somos más divertidos, familieros y amistosos«.

Sin embargo, ante la pregunta está en sus planes regresar a Argentina en algún momento, dejó en claro que sólo lo haría para visitar a sus seres queridos más cercanos. «Si, regresaría a la Argentina solamente para visitar, por el momento. La verdad es que todavía no tengo claro donde me gustaría asentarme. Tampoco me preocupa porque solo tengo 21 años«.

«Eso es algo que le pasa a la mayoría de las personas con las que he hablado. Una vez que viajás y conocés nuevos lugares, encontrás cosas que en tu país no hay, y viceversa, nunca sentís que estás completamente lleno porque te falta ese algo especial que hay en cada lugar».

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