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El Escuela de Fútbol de Deportivo Norte volvió a la actividad

El Escuela de Fútbol de Deportivo Norte volvió a la actividad

Poco a poco, algunas disciplinas van volviendo a ponerse en marcha y la Escuela de Fútbol del Deportivo Norte es una de ellas.

Desde este martes, la Escuela del Depo volvió a funcionar, para alegría de los muchos pibes concurren. Claro está, el regreso a la actividad será gradual y siguiendo estrictos protocolos.

En el retorno de los pibes a la cancha, estuvimos conversando con Martín Ponce, responsable deportivo de esta escuelita, quien dio detalles de cómo son los protocolos de bioseguridad que se sigue con los chicos.

«Estamos muy contentos por volver. A los chicos les viene bien porque vuelven a hacer ejercicio al aire libre, más allá de las restricciones lógicas que existen por cuestiones sanitarias», inició contando Ponce.

Por otra parte, indicó cómo es el protocolo que se sigue: «todo comienza dos horas antes que los chicos ingresen. Es cuando los padres les toman la temperatura a los chicos en sus casas y nos lo comunican. Luego, los chicos llegan hasta la puerta del club, donde hay un lugar para entrar y otro para egresar, bien diferenciados. En la puerta los recibe nuestro coordinador con alcohol en gel y yo los recibo y los llevo hasta la cancha. Tienen que usar barbijo hasta que empiezan a entrenar y luego de la práctica».

Pero no quedan acá los protocolos: «la cancha le hemos dividido en cuatro sectores donde trabajan grupos de no más de cinco chicos por sector. Cada uno de ellos entrena en forma individual, sin tener contacto con los demás chicos y cada uno con su pelota y sus elementos de trabajo como conos o tortuguitas».

La cancha del Deportivo Norte se ve grande, extensa, con grupitos de chicos acá y allá, todos ellos siguiendo las indicaciones de los profesores. Cada uno de ellos llegó con sus pertenencias, con su propia botella plástica con agua. Al retirarse, salen en forma ordenada, por los pasillos demarcados para ello, y guardando distancia social.

Cada entrenamiento (son los martes y jueves) no puede tener una extensión mayor a 50 minutos, y los padres y familiares de los chicos deben aguardar fuera del club hasta que la práctica finalice.

Estricto. Obsesivamente estricto, pero necesario. Los chicos no pueden jugar entre ellos, no pueden darse «pases», gambetearse ni patear al arco. Lo suyo, al menos por ahora, será profundizar en el manejo de la pelota y en divertirse en forma individual. Es lo que hay. Y es mucho más que lo que había hasta hace unos pocos días.

nakasone