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Consternación y tristeza tras un nuevo robo en el colegio Padre Viera

Consternación y tristeza tras un nuevo robo en el colegio Padre Viera

El colegio Padre Viera fue víctima de nuevos hechos delictivos. Ladrones les robaron los corderos que se encontraban en el campo escuela, instalaciones eléctricas de la nuevas aulas y caños de un aire acondicionado .

El Instituo Padre Viera, ubicado en Barrio Villa Oviedo, apela a la soclidaridad de los vecinos para poder hacer frente a diversos hechos delictivos que están atravseando hace semanas. AGNoticias dialogó con su directora Silvia Molina.

«Esto nos preocupa muchísimo sobre todo ahora que comienzan las vacaciones. Semanas atrás nos robaron los corderitos que estaban en nuestro campo escuela. Luego el 26 de diciembre nos dimos con que nos habían faltaban unas instalaciones eléctricas de las nuevas aulas. Finalmente acá en el edificio central se llevaron los caños del aire acondicionado«, comentó.

A continuación señaló que apelan a la colaboración de los vecinos para el cuidado del establecimiento. «Si bien hicimos la denuncia a la policía y están siempre atentos colaborando con nuestros llamados, solicitamos la colaboración del edificio que está en el barrio. Ante cualquier cosa que nos llamen por si ven algo extraño«.

«Todo lo que se invierte en el colegio tiene un costo enorme. Lo que es por ejemplo aire acondicionando que es de un aula de un convenio que tenemos con la CONAE, hoy por hoy se nos hace imposible reponerlo. O los corderitos que venimos cuidando y que son parte de la práctica de los alumnos. Después las aulas que fue un sacrificio hacerlas y ahora la instalación eléctrica. Que nos pase esto es volver a retroceder«.

La directora explicó que el presupuesto de lo que representan todos estos recursos, sobre todos los electrónicos, es de alrededor de un millón de pesos en volver a recuperarlo. «En el campo todavía estamos sacando los costos de volver a comprar el cableado».

«Hemos implementado más seguridad de la que tenemos habitualmente. Por ahí tenemos unas cámaras más o se va el casero de licencia y pusimos otro en el campo escuela. No obstante, que nos ayude la gente es fundamental. Nos preocupa también porque nunca nos habían entrado a robarnos en el espacio del aula«.

Por último sobre el cierre de año que tuvo el colegio, Silvia afirmó que fue un año de muchos proyectos y muchísimas actividades. «Fue un año muy positivo a pesar de todo, de mucho aprendizaje para los chicos y con la vuelta de la presencialidad plena después de la pandemia con la incorporación de diversos viajes. Para el 2024 queremos seguir perfeccionandonos, acompañando a los estudiantes y seguir trabajando con la Fundación EFETA».

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