Para conocer la historia de la reserva, primero hay que hablar del ex basural a cielo abierto de la ciudad de Alta Gracia situado en barrio La Perla, que funcionó por más de 40 años. Ante una lucha del movimiento vecinal por la salud -causa problemas respiratorios debido al humo de la quema permanente, problemas en la piel, etc.- y por la naturaleza -daño al ecosistema propio y circundante- el municipio decidió cerrarlo en 2013.
La lucha de los vecinos
A principios del año 2016 los miembros del barrio explicaron que se estaba formando un nuevo basural en un lugar que no estaba contaminado. Este lugar es muy cercano a las viviendas de barrio La Perla y se estaba convirtiendo en un sitio igual que el anterior que ya había sido cerrado. Como última medida se realizó un bloqueo del ingreso de los camiones con contenedores al predio. Gracias a esta medida, nace una mesa de trabajo que funcionó por un tiempo y prohibió el ingreso de basura y la poda en el lugar.
Una ONG conoció el predio por medio de vecinos que le presentaron la problemática. En base a esto, se firmó un convenio entre el municipio, el barrio La Perla, la ONG y las empresas de contenedores mediante el cual el municipio se comprometió a no volcar más residuos de ningún tipo y solo se aceptó el ingreso al predio de residuos de construcción y demolición.
Durante el año 2017 se realizaron distintas actividades, pero se destaca que mediante la ordenanza municipal N°10646 se declaró al predio Reserva Natural y Jardín Botánico de Remediación. El fin de la ordenanza fue conservar el bosque nativo y remediar la zona que fue contaminada. Además, se declaró una zona de sacrificio donde se permite seguir depositando residuos de construcción y demolición (RCD) y autos judicializados.
Una de los problemas con la zona de sacrificio es que al depositarse escombros, genera indirectamente un lugar de asentamiento de otros residuos potencialmente contaminantes provenientes de los contenedores. También sucede que vehículos particulares “tiran” cualquier tipo de residuo a la vera de la calle por lo que se convierte este sector en un micro basural. A pesar de contar con la ordenanza, se han llevado muchas reuniones para ver que la Reserva funcione como tal. Los vecinos también buscan abolir la zona de sacrificio de la ordenanza, ya que es perjudicial para el barrio.
En Diciembre de 2018 se presentó una propuesta de trabajo preliminar para llevar a cabo en la Reserva ante la secretaría de ambiente de la Municipalidad de Alta Gracia; y en 2019 se presentó ante la Universidad Católica de Córdoba un proyecto para realizar la línea base de la reserva con el fin de conocer los valores a conservar, pero no se pudo concretar con el municipio.
La actualidad
Desde 2018 hasta la actualidad se vienen efectuando caminatas por la Reserva con diferentes vecinos e instituciones, donde se cuenta la historia del lugar, se realiza reconocimiento de plantas nativas y de fauna. También se da a conocer que en Alta Gracia existe un área protegida que aunque tenga una zona a remediar y una zona de sacrificio contaminada, posee muchas hectáreas a conservar un bosque nativo donde convergen 2 ambientes: el bosque chaqueño serrano y el bosque de llanura del Espinal (un bosque casi extinto en la provincia de Córdoba)
Los vecinos esperaban solucionar algunos de los problemas que se han presentado como el de la zona de sacrificio, sin embargo la pandemia frenó el movimiento y las actividades grupales. Ante esta situación, los vecinos comenzaron a recurrir a medios virtuales para visibilizar la existencia y las problemáticas que convergen en la reserva.
