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Editorial

Un 25 de Mayo desde casa: sin actos y sin el clásico desfile

El aniversario 210 de la Revolución de Mayo, nos toca celebrarlo desde casa, sin actos presenciales y sin la celebración del clásico desfile.

Con el pasar de los días y semanas, la medida de aislamiento por la pandemia de Covid-19, hace que más eventos, aniversarios o simples actos, se reprogramen, no se celebren o sean de otra manera.

Y la jornada del 25 de Mayo, donde celebramos un nuevo aniversario de la formación del primer gobierno patrio, no es la excepción.

Empezando por la no asistencia a las escuelas, lo cual hace que los niños y niñas del nivel primario, no celebren los tan particulares y emotivos actos del 25. Donde docentes y padres, de manera conjunta, se encargan de «maquillar» a la dama antigua, al aguatero, al velero, a la mazamorrera y a tantos otros personajes de la vida colonial de antaño.

Acto por el 25 de Mayo en el 2017 – Jardín Merceditas – Fotografía: Luciano Gualda

De esta manera, se debió recurrir a la virtualidad para poder celebrar, aunque sea desde casa, el 210º Aniversario de la Revolución de Mayo.

A su vez, desde los establecimientos educativos no deben decidir qué alumno debe leer o interpretar alguna acción o canción; como así tampoco qué grados o años deberán participar del clásico desfile por las calles céntricas de la ciudad.

Y es por ello que en el presente año no pasa desapercibida la no concreción del mismo, ya que se trata de una fecha muy cara para con los sentimientos de los argentinos; y que de una u otra forma, cada habitante de este suelo la vivencia como la fecha patria que es.

La no celebración del clásico desfile

Los últimos desfiles en la ciudad de Alta Gracia, siempre fueron más que un simple acto; incluso cuando los propios alumnos «rezongaban» al momento de querer participar. Y esto es porque había algo que motivaba a participar: el no ir a clases, la feria de platos, la chocolatada con facturas o simplemente ver desfilar a un amigo, conocido o familiar.

Esto es así ya que dicho desfile no solo es de instituciones educativas, sino de escuelas de danzas, de deportes amateurs, clubes de barrio, agrupaciones gauchas; e incluso de fuerzas civiles como la policía, bomberos y defensa civil.

A su vez, una vez finalizado el desfile, al volver a la casa propia o a la de un familiar, seguramente la comida criolla no había de faltar; sumado a que en más de un lugar se realizaba la venta masiva de locro.

Y en el presente año las comidas típicas están más que presentes; con múltiples vecinos que han decidido elaborar el tradicional «locro del 25» o las clásicas empanadas criollas, ya sea para consumo familiar o para la venta. Por lo que se puede decir que la esencia del 25 de Mayo sigue estando presente, más allá de la ausencia de los actos protocolares.

A modo de síntesis, cada argentino y argentina vive de una manera especial y particular la presente fecha; ya que no se trata de un simple feriado, sino tal vez la efeméride con más celebración patria de todas.

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