El encuentro se jugará este domingo a partir de las 17.30 en el estadio Más Monumental de River. Será arbitrado por el neuquino Darío Herrera y lo televisarán ESPN Premium y TNT Sports.
River Plate, sólido puntero de la Liga Profesional de Fútbol (LPF) aunque con un andar tambaleante en la Copa Libertadores, recibirá mañana a Boca Juniors. Elevó su rendimiento y mejoró sus resultados con la llegada de Jorge Almirón como DT. Será una nueva edición del Superclásico que será el partido excluyente de la fecha 15 del torneo doméstico.
El desafío entre los dos colosos del fútbol argentino los encuentra en posiciones disímiles.anto en el torneo local como en la Libertadores, aunque eso importará poco y nada cuando empiece a rodar la pelota, ya que se trata de un partido aparte que supone siempre un envión anímico para el que lo gana, y a su vez deja secuelas para el que le toca perderlo.
River, en el primer Superclásico con Martín Demichelis como entrenador, asumirá el partido como líder cómodo de la Liga Profesional con 34 puntos, una diferencia abismal sobre Boca, que apenas sumó 18 unidades, aunque es el campeón vigente del certamen.
Ese andar apabullante de River contrasta con su participación en la Copa Libertadores, ya que marcha último en el Grupo D con un triunfo y dos derrotas, la última por goleada en Río de Janeiro ante Fluminense por 5-1, el martes pasado, que desnudó serias fallas defensivas.
Por el lado de los «Xeneizes», viene de conseguir dos victorias consecutivas y atraviesa su mejor momento desde que asumió Almirón el 9 de abril pasado, una sobre Racing (3-1) por el torneo local y la otra en la Libertadores, en Chile sobre Colo Colo (2-0) el miércoles último para encabezar las posiciones en el Grupo F con 7 puntos sobre 9 jugados.
En cuanto a los equipos, por el lado del «Millonario» la principal incógnita a develar es la presencia del zaguero chileno Paulo Díaz, quien sufrió una distensión muscular el 23 de abril pasado y llegará con lo justo, al punto que Demichelis duda si incluirlo de entrada.
