Según argumentó Grassi, tendría problemas respiratorios e indicó que se detectó un caso positivo de coronavirus en el penal de Campana, donde está detenido.
Julio César Grassi solicitó el beneficio de prisión domiciliaria por riesgo de contagio de coronavirus.
El religioso que está condenado a 15 años por abuso sexual y corrupción de menores, está preso en el penal de Campana. Aún le quedan por cumplir once años de detención.
En su descargo argumentó tener problemas respiratorios y además indicó que hubo un caso positivo de coronavirus de un guardiacárcel del penal.
En un diálogo con el canal TN, el abogado Juan Pablo Gallego dijo que la sentencia «está firme» y que «no hay motivo para que un violador salga a la calle».
Grassi está preso desde hace seis años. Condenado por abuso sexual, sumó también otra causa de dos años por malversación de fondos de la fundación «Felices Los Niños».
También será juzgado en un tercer proceso por desviar hacia la cárcel donaciones que eran para la fundación, comohabía reveladi Periodismo Para Todos (PPT) en 2014.
El abogado advirtió que Grassi «en pocas horas podría estar dando misa porque la Iglesia no lo sancionó».
Recordó que tiene condena confirmada por la Corte Suprema de Justicia. Y señaló que la pena debería estar controlada por uno de los dos juzgados de Ejecución Penal del distrito.
Fuente: Cadena 3
