Fabio Mackowiak, es el hijo del Sargento Mayor Pedro Miguel Mackowiak, del Ejército Polaco. Pese a que su padre falleció, Fabio recuerda ante las cámaras de AG Noticias las vivencias de Miguel en el campo de batalla.
«Lo que puedo decir de mi padre es lo que me dejó, como me formó, y todo lo que vivió en la guerra. Estuvo en los campos de concentración. Mi papá hizo amistades con cinco hombres. Poco se podía hacer, con el frío de la Rusia y el control militar. Por cualquier cosa, hicieron una soga y se ataron entre ellos. Decía que no es fácil sobrevivir en esas condiciones, pero con firmeza y también con orgullo.»
«Hay una historia con un oso. Cuando se estaban trasladando, intercambió un osezno por una lapicera vieja. El oso lo acompañó durante todo el camino. Tenían que asegurar las carpas, porque sino entraba y se comía la pasta dental. Era un animal tan sociable, que llevaba las municiones. Al terminar la guerra, al oso lo nombraron sargento. Tiene estatuas en Polonia y Canadá el animal. Terminó en un zoológico.«
Respecto al pensamiento de Miguel de la guerra, Fabio declaró que el pensaba que era muy cruel. «La gente no tiene noción de lo que es una guerra. El estaba en un tanque, y decía que era un ataúd de acero. Era tanto el dolor que mi papá sentía internamente, que abría una lata y le daba a la gente que había perdido todo.»
«Post guerra, mi papá no nos dejaba dejar comida en el plato. Y en las fiestas, nos hacía poner un plato más en la guerra por si alguien necesitaba. A pesar de estar en la guerra, nunca mató a nadie. Tuvo la oportunidad de matar a un alemán, pero no lo hizo. Lo dejó ir.»
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