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Salud

Estaba muerta y volvió a la vida gracias a un médico de Villa San Isidro

Oscar López es un médico pediatra, infectologo y Magister en salud pública y enfermedades transmisibles. Oriundo de Villa San Isidro y residente de Misiones, nos cuenta como le salvó la vida a Carolina Rominski, en el aniversario número 10 de este hecho.

Oscar López es un médico pediatra, infectologo y Magister en salud pública y enfermedades transmisibles. Oriundo de Villa San Isidro y residente de Misiones, nos cuenta como le salvó la vida a Carolina Rominski, en el aniversario número 10 de este hecho.

El caso de Carolina Rominski es verdaderamente increíble. Luego de que la chocaran en su moto, su cuerpo fue despedido a varios metros. Luego del impacto, la policía creía que había muerto. Afortunadamente, no fue el caso. Fue trasladada a Posadas de urgencia, con el diagnostico de “rotura ósea con aparente pérdida de la masa encefálica”.

Durante el traslado, Carolina tuvo un paro cardiorrespiratorio. El primer paro de ocho, que tuvo posteriormente. Pese a que la joven quedó sin signos vitales, la ambulancia siguió su ruta hasta llegar al hospital pediátrico de Posadas, donde lograron reanimarla.

Dr Oscar López

En diálogo con Oscar López, nos cuenta como recuerda este increíble suceso 10 años más tarde: «Carolina entró al hospital a terapia, con un politraumatismo con traumatismo craneoencefálico. Entró muy grave al hospital.

Cuando llegan niños con estos cuadros, luego de estabilizarlos, uno empieza a ver que se puede corregir del estado, como transferir sangre. El otro médico con el cual estuvimos a la par fue el Dr. Mario Barrera, quién me dijo que había que operarla, pero en ese estado era casi imposible. Entonces yo me quedé con ella y con el equipo que me acompaña.

La estabilizamos toda la noche. Es una situación casi artesanal se podría decir: se agrega un liquido, se saca otro, y así. A la madrugada, de forma repentina, y con la emoción y sorpresa de todos los que habíamos estado trabajando, Carolina empezó a dar algunos signos de mejora en su cabeza.

Reanimar a esta niña fue como reanimar a todo niño que entra con estos politraumatismo. Poniendo todo y más para tratar que estos chicos salgan adelante. Gracias a Dios, la mayoría de estos niños salen, con el esfuerzo no de una persona, sino de un equipo completo.

No se si se acordarán los padres, pero me acuerdo que le dije a la madre que rezaran. Por los niños que están en esa situación, y por nosotros, para que Dios nos guie. También, luego de decirles que Carolina estaba muy grave con pocos signos vitales, les dije «ojalá mañana me digan ‘te equivocaste».

Al tiempo me lo crucé al padre, yo iba saliendo del hospital. Carolina había salido de terapia intensiva. Le dije «no me dijiste que me equivoqué. No me lo digas hasta que Carolina venga corriendo a abrazarme». Al tiempo Carolina me abrazó, y me regalo una foto que tengo guardada de recuerdo. Ahí pude decir que me equivoqué.

Seguramente fue un milagro. Lo que estoy seguro es que yo no lo hice solo, hubo un equipo detrás. Carolina dice que vio una persona de blanco que le soltó la mano como diciendo ‘vas a volver a casa’, yo creo que esa persona también nos guio a nosotros.

A Carolina la veo todos los días, en la foto que nos dejó como recuerdo. Lo que puedo decir, es que Carolina representa a todos los niños que uno cree que no van a salir, pero salen. Por eso no bajamos los brazos. En el Hospital Dr. Fernando Barreiro de Posadas, hay muchísimas historias parecidas a la de Carolina, y eso es lo que más nos satisface.«

nakasone