Este viernes, imputaron de “homicidio culposo” al cirujano Javier Romero Reyna y a la anestesista María José Ledesma por la muerte de Sol Arbach, la mujer de 33 años que falleció durante una cirugía estética.
Lucas de Olmos, abogado defensor del cirujano, en dialogo con Radio Universidad dijo que su defendido declaró por más de cuatro horas y la anestesista, se abstuvo.
«Declaró por espacio de cuatro horas en el despacho de la fiscal constestando todas las preguntas que ésta le quiso hacer, dando razones de sus dichos y graficando en lapiz y papel cada extremo su declaración», explicó el letrado y agregó que «en cambio la anestesista hizo uso del derecho de declarar». Según trascendió, Romero Reyna habría enfatizado la falla en el respirador artificial.
Sol Arbach, era oriunda de Alta Gracia y falleció en julio del 2019, durante una cirugía de corrección mamaria en el Centro Privado de Cirugía Plástica Dr. Rafael Cinelli, ubicado en el Cerro de las Rosas, barrio cordobés.
La altagraciense tenía 33 años y era madre de dos niños. Mientras estaba en el quirófano su estado se deterioró por un neumotórax que sufrió durante la intervención. Esto derivó en una hipoxia y luego en una muerte cerebral.
