Diferentes instituciones internacionales intentan desarrollar barbijos que detecten el coronavirus, en cuestión de segundos. Los prototipos, están en etapa de prueba.
Un equipo de científicos del Instituto Tecnológico de Massachusetts y la Universidad de Harvard están desarrollando barbijos que detectan el virus COVID-19. La idea consiste en que estos tapabocas produzcan señales fluorescentes cuando una persona contagiada respire, tosa o estornude.
Esta alerta funcionará gracias a un pequeño dispositivo instalado en la mascarilla que absorbe la humedad de la saliva y analiza la muestra. Si los sensores detectan el virus, cambian de color a través de una reacción química. El proyecto se encuentra en “etapa de prueba”. Pero, según informaron, -hasta el momento- dio resultados positivos, y puede servir también para que los médicos diagnostiquen pacientes en el acto.
La Universidad de Leicester y el Servicio Nacional de Salud británico, en tanto, trabajan en un proyecto similar, que consiste en un barbijo con dos tiras impresas en 3D para atrapar los microbios exhalados y determinar el potencial de contagio.
“La medición de la cantidad de virus que se expulsa nos permitirá comparar los niveles del virus en diferentes individuos. Esto podría ayudarnos a enfocar los esfuerzos de control para prevenir la propagación”, aseguró Mike Barer, profesor de microbiología clínica de Leicester. Además agregó “La máscara se puede procesar fácilmente en cualquier laboratorio de diagnóstico de virus. El desarrollo exitoso de este enfoque podría ser transformador”.
