Transcurridos más de cien días de cuarentena el sector hotelero y de alojamientos de la región continúan sin poder abrir sus puertas.
La realidad del sector es preocupante. Los alojamientos de la ciudad de Alta Gracia como de las localidades aledañas no pertenecen a cadenas hoteleras con grandes capitales; son en su mayoría pymes y emprendimientos familiares. El recurso que tienen para mantener estas estructuras sale del propio ahorro y la prolijidad con la que han trabajado en lo que llevan brindando servicios.
AGNoticias pudo dialogar con algunos de los representantes del sector para conocer a fondo cómo están sobrellevando la situación y qué panorama tienen para los meses por venir.
Para ello convocamos a la entrevista a Barbara Schuster (Alta Gracia Hostel); Daniela Paganini (Solares Hotel); María Elena Compagnusi (Posada Mi Morada B&B); Zulema Daniele (Nuna Ayni Departamentos) y a Fernando Tissot (Hotel Ritz).
Al momento de analizar la situación actual, un problema son las boletas de servicios que junto a las cargas impositivas, no cesaron en ningún momento y se van acumulando mes a mes.
Si bien comentaron que pudieron acceder a créditos y ayudas que brindó el gobierno, la realidad es que ello no ha sido suficiente. Esto debido a que están contrayendo deudas que se profundizan en un panorama de incertidumbres, el cual no tiene en claro una fecha de reapertura.
Por ello, desde el sector reclaman con urgencia se dicte la Ley de Emergencia Turística. Una normativa que apunte a salvar las empresas.
Mientras tanto, el Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación dio a conocer los protocolos de seguridad para prevenir el Covid-19. Esto pensado en el momento de la reapertura. Se hace mucho hincapié en aumentar la higiene personal, de las áreas comunes y en las habitaciones. Sumando controles sanitarios de todas las personas que ingresen al establecimiento y además; mantener la distancia social en la medida que sea posible dentro de los espacios.
De cara a la “nueva normalidad”, todos concluyen que va a ser algo momentáneo hasta tanto pase el riesgo al contagio o bien se descubra una vacuna. Los adultos mayores van a seguir cuidándose con más rigurosidad mientras que los más jóvenes lo tomarán más descontracturados.
Con respecto a la prestación de servicios aseguran que se van a tratar con profesionalismo. Aplicando los protocolos y cuidados necesarios, capacitando al personal y trasmitiendo confianza al turista para que disfrute de su estancia. En la medida que se pueda incorporar tecnología y criterios de sustentabilidad para agilizar los procesos se hará, pero mientras tanto pondrán a punto las instalaciones existentes.
Para concluir, los entrevistados quisieron trasmitir un pedido hacia la Municipalidad. Un pedido dirigido a generar un sello de calidad sanitaria que avale a los establecimientos legalmente habilitados a prestar servicios. También, poner en agenda como tema urgente a tratar y colaborar, el habilitar -en la medida que se pueda- algunas opciones de estadía.
Nota y fotos: Franco Cantarini
