A veces, estamos tan concentrados en nuestra cotidianidad que pasamos por alto momentos cargados de arte. AG Noticias dialogó con artistas callejeros, quienes expresaron cómo es trabajar en las calles.
Héctor y Alberto, oriundos del gran Buenos Aires, pasan sus días musicalizando las calles de nuestra ciudad con su trompeta y trombón. Para ellos, pararse en los semáforos es lo que les permite seguir compartiendo su arte en diversos lugares. “Esta es una forma de cómo viajamos, haciendo música en los lugares a los que vamos.” comenta Héctor y añade que no se limitan a los géneros: “Tocamos lo que se va dando, repertorios de música latinoamericana y cumbia”.
Ambos enseñan en centro culturales autogestivos que se enfocan en el arte y el barrio, por eso dejan un mensaje para todos los jóvenes interesados en la musica: “Primero hay que tener ganas y saber que están estos espacios que te apoyan, te contiene, te orientan. Hay que buscarlos.”
Con respecto a Alta Gracia, ambos expresaron que la ciudad los ha recibido muy bien. «No obligamos que nos escuchen ni colaboren, porque es una intervención que la gente no se espera» comenta Alberto.
Otros artistas, misma pasión
Diego y Julieta son una pareja malabarista que, desde hace 6 años, dedican su vida al arte callejero. Julieta es profesora de Teatro recibida en Tucumán y Diego afirma que su mejor maestra fue la calle. Si bien con la pandemia se vieron obligados a dejar el exterior, hoy se encuentran felices de poder trabajar con sus malabares en los semáforos de la ciudad.
Para Diego, la felicidad va de la mano con la independencia: “Ser autogestivo, poder manejar tus horarios y lo que uno precisa. Esto es lo que te lleva al arte independiente y me lleva a no estar vinculado con una movida cultural”.
Por otro lado, Julieta apunta hacia un arte popular “Quiero un arte que sea inclusivo para todos, que todos podamos ver arte y no tengamos que pagar plata para hacerlo. Que esté en la calle, en todos lados”. También afirma que el semáforo es más que una esquina: “Acá hay mucha cultura, viene gente de todos lados que nos enseña. Nosotros compartimos todos nuestros conocimientos”
Por último, agregaron que, generalmente, la gente de Alta Gracia los recibe con un buen trato. Sin embargo, no niegan que existe un prejuicio sobre todos los artistas callejeros que invisibilizan su formación artística y desvaloriza por completo la cultura del arte popular.
