Durante la jornada de hoy, la Comuna de Villa Los Aromos tuvo una agitada asamblea para poner a consideración de los vecinos lo actuado en la gestión, y los números del balance del último año.
Se sabía que el cónclave vecinal iba a estar teñido de tensión, pero las cosas llegaron incluso más allá de lo pensado. El disgusto de los vecinos se sumó al de los propios empleados municipales. Los reclamos por la incorporación a planta permanente de dos profesionales que estaban contratados, se agregaron al malestar generado por el despido sin aparente motivo valedero, de 18 empleados comunales en los últimos días.
Uno de los primeros que tomó la palabra fue el ex jefe comunal Antonio Bruno, quien fue duramente increpado por los vecinos, a punto tal que se descompensó y tuvo que ser atendido y retirado del recinto por personal médico que fue llamado al lugar.
Luego, todo el peso de la asamblea quedó sobre el actual Jefe Comunal Carlos Zavala. Solo, sin laderos y sin las espaldas políticas que tuviera días antes de las elecciones fue el blanco de los reclamos, las silbatinas y los insultos.
Al momento de poner en consideración los números del último ejercicio contable, éstos fueron rechazados por la totalidad de los presentes quienes por otra parte, pidieron explicaciones acerca de dos temas puntuales: el despido de 18 empleados hace algunos días, y la incorporación a planta permanente de una abogada y una asistente social que eran contratadas por la comuna.
Al respecto, Zavala se comprometió a rever la situación de los empleados cesanteados, quienes volverían a trabajar hasta tanto se estudie sus situaciones. En tanto que sobre las profesionales incorporadas a planta permanente, dijo que «la medida se tomó por pedido expreso de Bruno».
A su turno, la electa Jefa Comunal, Nelly Morales pidió una reunión con las actuales autoridades. Se llevará a cabo el próximo 5 de julio. Allí, Morales concurrirá con su contador y con un grupo de asesores. «El objetivo es conocer en profundidad la situación de la comuna y comenzar una transición civilizada», dijo Morales.
En definitiva, la retirada de Zavala y su gestión termina mostrando el disgusto de la mayoría, y el rechazo a lo realizado tanto por él como por su antecesor Antonio Bruno, hecho que quedó demostrado ya antes de esta asamblea, cuando los vecinos decidieron en las urnas.
