AG Noticias le da la bienvenida a una nueva sección que buscará contar las historias de aquellos altagracienses viviendo en diferentes partes del mundo. En esta oportunidad, diálogamos con Gerardo Cuello, el técnico electromecánico que recorrió toda Sudáfrica y Etiopía.
AG Noticias le abre sus puertas a una nueva sección en nuestro portal informativo bajo el nombre «Altagracienses por el Mundo». Un espacio dónde buscaremos acercarles a los lectores historias de vecinos, amigos o familiares que dejaron su ciudad natal y que ahora están viviendo diferentes experiencias alrededor del mundo. En esta oportunidad, conocemos más al altagraciense Gerardo Cuello.
Gerardo transitó su niñez en en nuestra ciudad y se recibió como Técnico Electromecánico. Actualmente desempeña su profesión en Etiopía como Supervisor de Grúas Torres. Primero, vivió siete años en Sudáfrica y ahora ya van casi siete también en Etiopía. Previamente, estuvo en Brasil y en Colombia.
«Apenas me recibió trabajé en Buenos Aires y en otras partes del país para una compañía montando estas máquinas. Siempre yendo y viniendo hasta Alta Gracia. En nuestra ciudad nunca hubo esto y lamentablemente tuve que elegir trabajar en el exterior«, comentó.
La historia que llevó a Gerardo a dejar Alta Gracia fue meramente por motivos laborales. Así lo explicó él: «En mi país no hay mucho trabajo y menos para mi profesión. Me trasladó la compañía en la que hace muchos años que trabajo. Estoy viviendo acá exclusivamente por ello pero la idea era no abandonar mi país. De hecho, cada cinco meses y medio, siempre que puedo me voy de vacaciones. Mi familia está en Alta Gracia. No estoy viviendo definitivamente».
Pandemia y protocolos
Como es bien sabido, la pandemia del Covid19, conocido comúnmente como Coronavirus, se ha expandido a varias regiones alrededor del mundo. En este contexto, Gerardo señaló que fue algo complicado como en todos lados. «Estuve casi más de un año y medio sin ir a casa. Me tuve que quedar un tiempo indefinido y cancelé tres veces el viaje a mi país«.
En cuanto a los protocolos, continúan con el test de Covid y el PCR si uno quiere viajar. «Sin ir más lejos, recientemente lo tuve que hacer porque fui a la capital del país ya que tuve que ir a la Embajada Argentina por la renovación del pasaporte«.
La vida en Etiopía
El hombre expresó que África es un continente bastante exótico que llama mucho la atención a los visitantes. Sin embargo, en Etiopía todo es un poco más díficil. Al estar tan en el interior de esta región, hay muchas limitaciones de logísitca. Además de que se encuentran en una guerra civil en parte por cuestiones religiosas y en parte por política.
Básicamente la oposición quiere tomar el poder y el actual gobierno no se lo quiere dar. Todo esto ocasiona que escaseen suministros, lo que deriva en otras consecuencias más graves: producto de este conflicto, en ocasiones suelen cortar el teléfono y el internet por tiempo indefinido
«En la época que los estudiantes de este país están en exámenes, cortan como por dos meses el internet. Según lo que dicen es para que no se copien. Por suerte nuestra compañía tiene su sistema de internet propio y eso me posibilita a mi poder comunicarme con mi familia en Alta Gracia«.
No obstante, la cultura de esta zona es algo totalmente llamativo. En Etiopía y según su calendario se encuentran en el año 2014 y están preparándose porque dentro de seis días festejarán su año nuevo el 6 de octubre y ya para ellos será el año el 2015.
«Es un país muy pobre y hay muchas religiones diferentes donde predominan los ortodoxos. Su lengua oficial es El Amárico y algunos hablan inglés los que tienen la suerte de que en las escuelas le enseña. Es el único país de África que nunca fue conquistado«, agregó Gerardo.
Comida típica y moneda oficial
En lo que respecta a su comida, el técnico sostuvo que el plato más clásico es el que se conoce con el nombre de: «Injera». Se trata de una masa en la que le colocan muchas verduras: papas, tomate, cebolla, etc. A su vez, el cáfe es algo a resaltar dado que según Gerardo, Etiopía se destaca por la exquisitez del mismo.
«Casi nunca le pueden poner carne porque para ellos es imposible de comprar diariamente.Tampoco utilizan cubiertos como estamos acostumbrados a hacerlos nosotros, comen con la mano. No es algo muy higiénico que digamos, pero así es aquí».
La moneda oficial es el Birr etíope y mensualmente un trabajador de posición media está ganando unos 4.000 Birr al mes. «Para poner un ejemplo, un kilo de carne acá les cuesta como 600 Birr. No pueden comerla todos los días».
¿Cómo se vive en Sudáfrica?
Por otro lado para el técnico electromecánico, Sudáfrica es un país más avanzado dado que fue colonia inglesa y por ello cuenta con mucha tecnología. Desde el 2009 y hasta el 2015, Gerardo estuvo trabajando en un proyecto compuesto por varios Parques Nacionales y reservas en donde podía ver todos tipo de animales: jirafas, leones, cebras.
«Es un país rico en minas, tienen oro y diamantes. Es rico también en naturaleza, en animales. Las autopistas son muy buenas«, añadió.
Aún así, en ciertos lugares persiste todavía sistema de segregación racial conocido como «Apartheid». «Hay un amplio porcentaje de gente blanca que son los bóeres, descendientes de afro holandeses y la mayoría de ellos cuentan con una buena posición económica.
En lugares donde están los blancos es muy raro que ingrese una persona de color. Los sudafricanos de aquí te hacen sentir esa diferencia o por lo menos yo me he sentido así. Es gente buena sí, pero eso todavía es algo que existe en ellos».
Argentina es sinonimo de hogar y familia
Por otro lado, Gerardo manifestó que siempre tiene presente a nuestro país a pesar de vivir en el extranjero y que sin dudar lo que más extraña de Alta Gracia es a su familia y los asados. «No lo digo yo solamente, lo dicen muchos extranjeros que conozco. Por fortuna, tengo muchos amigos de diferentes países del mundo y realmente los que han visitado Argentina concuerdan conmigo«.
Finalmente, el hombre indicó que extraña mucho la música de nuestro país y sobre todo de Córdoba, dado que en algún tiempo se desempeñó en el cuarteto. «Fui músico de Alfredo Rojas cuando se dedicaba en su momento al cuarteto. Grabamos dos discos con él. Sin embargo, sentía que eso no daba para vivir y fue como un impasse que hice durante mi profesión durante dos años. Si cuando fui joven me dedicaba mucho a la música«.
