Adolfo «Fofi» Moreschi y Edu Casal, los dos pugilistas profesionales que tiene Alta Gracia, retornaron de su paso por tierras mexicanas, y miran hacia adelante, sabiendo que en el país del norte ganaron en experiencia, contactos y conocimiento, y que ahora llega el momento de seguir creciendo con lo aprendido.
AGNoticias, en forma exclusiva, dialogó con Fofi al respecto, y de lo que vendrá en sus carreras:
¿Puede resumirse en un par de frases la experiencia México?
No es sencillo, porque tiene muchos costados. Lo que pasó fue muy importante. En lo personal, es una historia que siempre quisimos cumplir, y que consideramos que a largo plazo va a tener muy buenos resultados.
Han ido a sembrar, ¿la cosecha viene ahora o en un tiempo?
Si, definitivamente sembramos. Hemos cosechado contactos con gente buena y que sabe mucho en el mundo boxeo. Gente que cree en lo que uno está haciendo y eso da esperanzas de que un día se vea todo lo que hicimos en este viaje.
A esta altura, es difícil separar al Moreschi boxeador y al Moreschi que va detrás de un sueño…
Van juntos (risas), el que sueña con un futuro, con el boxeador y también con el que considera que puede ser técnico, entrenador de otros chicos. Pero siempre viendo al boxeo desde todos los ángulos.
Trabajo y constancia, te sobra…
Eso lo voy a garantizar siempre. Me voy a retirar del boxeo como deportista el día que la gente que estamos formando terminen de aprender el concepto de perseverancia. Mientras tanto, sigo en la de siempre, seguir peleando y formando chicos.
¿Como fue la experiencia para Edu?
Altamente positiva. Conozco como nadie a Edu, puedo ver mucho boxeo y haber hecho mucho guante con él, pero las miradas de otros siempre aportan para ver cosas más finas. Para eso fuimos a México, donde hay gente que trabajó con él en el perfeccionamiento de algunos detalles.
¿Qué conceptos tuvo la gente de México de ustedes?
Se encontró con dos boxeadores, dos soñadores. Uno que tiene pegada y el otro que además de pegada tiene la lucidez de un boxeador que trabaja en todas las distancias. Donde fuimos lo vieron boxear a Edu y se quedaron encantados. Lo digo desde la convicción de saber hasta dónde puede dar.
Edu Casal, ¿y después?
Además de Edu, en nuestro proyecto de siempre, estamos formando boxeadores con otra cabeza, con otra forma de ver el deporte con ojos de profesional en todo sentido. Hay una nueva era de boxeadores que va a empezar a aparecer en poco tiempo.
O sea, ¿qué hay en lo inmediato?
El 24 de noviembre un festival amateur en el Club Alianza de Despeñaderos, con 8 o 9 peleas. Va a ser un lindo festival para ir observando a la nueva generación.
¿Y en cuanto a Moreschi y Casal?
En el corto plazo, hacer una pelea en diciembre, que las necesitamos. Queremos subir al ring al 100%, como siempre. No nos desespera, pero queremos pelear antes de fin de año.
¿Y después?
Volver a México, donde hemos firmado un contrato con una de las promotoras más importantes de allá, y que nos asegurará peleas tanto en México como en otros países. O sea, empezar a cosechar lo que todo este año se fue sembrando.
¿Y el proyecto acá?
Continuarlo con la gente que queda acá. Hay gente capacitada y que entiende por dónde pasa la cosa. Los chicos que entrenan llevan ya un tiempo largo con todo a su disposición. Hoy son deportistas con seis o siete años entrenando en doble turno, con un preparador físico. Eso es todo un adelanto para el boxeo de Córdoba.
Trabajar desde el pie…
Tiene que ser así. ¿Cómo puede ser que alguien quiera enseñar a boxear si nunca a boxeado? Ahí nacen los problemas. Hoy, los chicos que trabajan con nosotros aprenden desde la experiencia que les podemos brindar, y ven que hay un camino, que otros como Edu y yo lo estamos caminando, y ellos lo pueden hacer también.
Y allí siguió charlando con nosotros Fofi Moreschi. El pugilista, el soñador, el formador de boxeadores. El tipo que la viene remando desde hace años y que está más cerca que nunca de conseguir ver cristalizado su trabajo.
