La familia de Tania Gandolfi y su hija Agustina García, las dos cordobesas fallecidas tras ser atropelladas por un auto en Rosario, atraviesa un profundo dolor y clama por justicia. Las abuelas de la adolescente calificaron al conductor, Agustín López Gagliasso, como un “asesino al volante”. Además exigieron que tanto él como sus padres recibieran la condena máxima.
El trágico episodio ocurrió mientras la familia disfrutaba de sus vacaciones y salía a cenar. López Gagliasso, de 20 años, impactó contra ellos mientras conducía un Peugeot 206 a 120 kilómetros por hora, causando la muerte de las cordobesas Tania, de 41 años, y de su hija Agustina, de 16. Diego, esposo de Tania, y la hija menor del matrimonio, de solo 6 años, lograron sobrevivir al siniestro.
La indignación crece al conocerse los antecedentes del joven director, quien hace dos años había perdido su licencia de conducir por manejar en estado de ebriedad. Además, acumulaba múltiples infracciones de tránsito, incluyendo exceso de velocidad, invasión de carriles exclusivos y cruzar semáforos en rojo.

En medio del dolor, María Cristina Barrionuevo, abuela de Agustina y suegra de Tania, expresó su desconsuelo y exigió justicia. “Pido que se aplique la pena máxima no solo para él, sino también para sus padres, porque permitieron que alguien con este historial manejara. Mi nuera era como una hija para mí, y mi nieta era la luz de nuestros ojos. No podemos aceptar que esto quede impune”.
La abuela también habló sobre la difícil situación que enfrenta su hijo Diego y su nieta más pequeña. “Mi hijo está destrozado, y mi nieta más chica, aunque sobrevivió, quedó muy golpeada y fue testigo de todo. Ahora tenemos que ser fuertes por ella, porque nos necesita”, dijo entre lágrimas. La niña, actualmente internada en un hospital de Rosario, podría ser trasladada a Córdoba en los próximos días.

