Luego de varias quejas, Valle de Anisacate decidió dar marcha atrás con el impuesto que pretendía cobrar $2000 a quienes tuvieran pileta.
El problema comenzó hace meses, luego de que Valle de Anisacate publicara la resolución 32/2020. Dicha resolución establecía la posibilidad de cobrar una tarifa extraordinaria por el servicio de agua de piscinas domiciliarías.
Al instante, los vecinos mostraron su descontento con la situación. Algunos vecinos incluso llamaron al jefe comunal Jorge Merlo a una reunión con el objetivo de una reconsideración de dicha tarifa extraordinaria ante la situación de pandemia. Los vecinos también solicitaron que, en medida de lo posible se omita esta tarifa extraordinaria por la intensa baja de ingresos familiares ocurridos en todos los hogares.
Ante el pedido, la respuesta por parte de las autoridades fue positiva. Ayer lunes, en un comunicado, informaron la derogación de la resolución 32/2020. «la Honorable comisión comunal de la comuna del Valle de Anisacate RESUELVE: DEROGAR la resolución 32/2020 en toda su extensión y objeto disponiendo la anulación del cargo extraordinario por el mayor consumo del agua potable por parte del colectivo poblacional que consta de piscinas recreativas en el ámbito de esta comuna del Valle de Anisacate»
Con respecto al tema, Jorge Merlo expresó su opinión respecto al tema: «hemos escuchado como lo hacemos siempre a los vecinos, hemos hecho la evaluación. Y sí, corresponde que a través de la crítica constructiva de cada vecino tomemos la resolución de dar marcha atrás». También agregó que, en gran medida, la pandemia influyó en la decisión, ya que el estado económico que atraviesa Argentina no es ajeno a la localidad.
Finalmente, Merlo aclaró que también pretenden concientizar a la población del uso de agua potable, para favorecer al medio ambiente.
