Hilda Zagaglia es una artista de destacada y prolongada trayectoria. El Museo de la Estancia Jesuítica le rendirá un homenaje en el marco del Mes de la Mujer.
Hablar de Hilda Zagaglia es hacer referencia a una artista única por su multiplicidad de expresiones. Desde la pintura a las esculturas, pasando por el arte investigativo, Hilda ha sabido resumir en sus acciones distintas expresiones.
Dotada de una personalidad que la hace única e irrepetible, Zagaglia ha sabido imbuir siempre su obra de contenidos sociales e históricos. Su lucha de años por el reconocimiento de la importancia histórica, cultural y arquitectónica de la acequia jesuítica de Alta Gracia tal vez sea uno de los mejores ejemplos al respecto. Ello motivó a lo largo de los años la realización de infinidad de muestras concientizando a quienes las visitaron, de la importancia y la relevancia del tema.
Sus trabajos de visibilización del pasado de la Estancia, poniendo el acento en la existencia de esclavos africanos trabajando en sus obrajes y campos puso al descubierto una realidad que muchos negaban. Y que Zagaglia supo exponer a través del arte con contenido histórico.
Hilda Zagaglia es polifacética y su labor la ha llevado a realizar trabajos en forma conjunta con los establecimientos educacionales de la ciudad; siempre poniendo su arte al servicio de la cultura, la educación y el compromiso.
El homenaje será mañana 10 de marzo por la mañana, en el Museo de la Estancia (qué mejor lugar que ese).
«Las mujeres aportan experiencias, perspectivas y habilidades diferentes, contribuyendo de manera indispensable en todo tipo de decisiones. En el caso de Hilda Zagaglia, sus distintas obras nos hablan de sus luchas, sus sueños, sus convicciones. La exposición temporal «El lenguaje de las cajas» en nuestro Museo es una oportunidad única que nos propone otras maneras de ver el mundo». Así reza la invitación del acto que se llevará a cabo mañana miércoles a las 10 horas.
