Los dueños del Grupo Vicentin reaccionaron el lunes por la noche en forma negativa ante la intervención dispuesta por el gobierno y advirtieron que la decisión les provoca «incertidumbre y preocupación».
«El camino elegido nos llena de incertidumbre y preocupación. Nos hemos enterado de la decisión por los medios. Estamos realizando las consultas necesarias para entender las características y la profundidad de las medidas anunciadas», sostuvo la compañía Vicentin en un comunicado.
Ls accionistas mayoritarios de la compañía reivindicaron la «legitimidad de proteger los derechos de una empresa argentina y de sus accionistas, de origen familiar y del interior del país. La empresa se encuentra ajustada al marco legal vigente. Permanece dentro de un concurso preventivo de acreedores y que ha manifestado reiteradamente la voluntad de honrar los compromisos asumidos».
«Desde diciembre de 2019 el Directorio de Vicentin viene explorando distintas alternativas para refinanciar su deuda y recobrar el nivel de operación que supo tener en el pasado; que de ninguna manera se remonta a los últimos 4 años, sino que puede medirse en décadas de esfuerzo e inversión», sostuvo la empresa.
El lunes por la tarde, el presidente Alberto Fernández anunció la firma de un DNU para la intervención del grupo cerealero Vicentín. Además anticipó que enviará al Congreso un proyecto de ley de expropiación para afrontar el proceso de concurso preventivo que podría derivar en su quiebra.
Fernández precisó que todos los activos del Grupo Vicentín pasarán a ser parte de un grupo fiduciario que estará a cargo de YPF Agro. Asimismo adelantó que al frente de la intervención estará Gabriel Delgado un economista que actualmente se desempeña en el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta); quien es especialista en finanzas y en economía agropecuaria.
A través de una conferencia de prensa desde la Quinta de Olivos, el mandatario dijo que con esta decisión la Argentina está «dando un paso hacia la soberanía alimentaria”.
