Ayer en horas de la tarde, Claudio Murúa y Verónica Rodríguez se presentaron en forma espontánea ante la Fiscalía de 1º Turno de Alta Gracia, a cargo del Dr. Diego Fernández.
Murúa (quien figura en IPJ como Secretario de la Fundación) y Rodríguez (una de las «capitanas» en Alta Gracia) lo hicieron luego de conocerse, a través de AGNoticias, de la denuncia realizada por dos vecinos damnificados por la red piramidal de inversiones.
Estas dos personas son empleados de EPEC, un ámbito laboral donde la Fundación Dream Team hizo nido desde un primer momento. Es que allí, desde hace mucho tiempo trabaja también quien hoy por hoy figura como quien encabeza esta Fundación. Se trata de Pablo Díaz Mussi, que junto a su hermana Karina (médica, entre otros sitios de la Policía y del Hospital Illia) son Presidente y Tesorera respectivamente de Dream Team. O sea, uno dirige y la otra maneja los dineros.
La presentación ante la Justicia por parte de Claudio Murúa y Verónica Rodríguez se hizo a través de un escrito presentado por quien es su representante legal, un reconocido abogado penalista local.
«Ocurro por el presente a comparecer en forma espontánea a los efectos de aclarar mi situación procesal solicitando se mantenga mi estado de libertad personal y resuelva la situación planteada, atento a lo dispuesto por el Art. 270 del CPP».
En base a ese texto, ambas personas hicieron su presentación ante el despacho del Fiscal Fernández, quien lleva adelante la investigación de la posible estafa por pirámide financiera en Alta Gracia.

Esta presentación abre un nuevo capítulo en esta historia. Esto, por cuanto ambos comparecientes con este paso dejarían más expuestos aún a los hermanos Díaz Mussi como organizadores y gestores de la maniobra sospechada de ilegal que terminó involucrando a miles de vecinos de la ciudad.
Esta especie de «rebelión de los capitanes» sería solo el comienzo de otras presentaciones espontáneas que estarían por darse en las próximas horas. Mientras tanto, y como si nada sucediera, Pablo Díaz Mussi y su hermana Karina siguen instando a sus inversores a que depositen los 88 dólares que les permitirían (según afirman) recuperar el dinero aportado y sus intereses.
Para ello, los Díaz Mussi «bajan» los mensajes que desde Buenos Aires envía ese enigmático personaje apodado la «China», casi como una gurú financiera a cargo de un sistema sospechado por muchos, rechazado por otros tantos y que no tiene autorización legal para operar en nuestro país.
El costado político de la historia
Entre los hoy supuestos damnificados hay personajes de la política local. Algunos de mucho peso, otros de segundo y tercer orden, pero relacionados al mundillo político. Y para que no queden dudas, no hay distinción de color partidario en este tema. Algunos de ellos con su ingreso a la pirámide, envalentonaron a otros para que también dieran el paso.
Como suele ocurrir en todos estos casos, siempre habrá gente que use un tema para convertirlo en herramienta de la mala política y llevar agua para su molino. ¿Hay políticos involucrados entre los inversionistas? Si, los hay. ¿Son responsables de una posible estafa? Tal vez. ¿Son tan víctimas como los demás que entraron en la pirámide? Quizás. Será la justicia quien determine si son verdugos o víctimas, y no el dedo inquisidor de quien quiera sacar provecho político el que deba determinarlo.
El «Acta Compromiso»
Ayer, AGNoticias tuvo acceso a un documento interno de la Fundación Dream Team que deja al descubierto la forma de accionar de este grupo. En esta «acta compromiso» entre otras cosas queda claro que la Fundación responde directamente a Knight Consortium, por cuanto su mismo texto lo explicita.
En el acta, que se firma para ingresar como aportista, se entremezclan varias cuestiones: el compromiso para asistir a reuniones mensuales obligatorias, la capacitación y aprendizaje para la utilización de la plataforma Rainbow y Binance y el compromiso de cada miembro de realizar periódicamente en «actos benéficos» en nombre de Rainbow y de Dream Team (o sea, mostrar ante la sociedad una cara benefactora para los sectores más desprotegidos).
Así, el complejo mundo de los números, los intereses poco creíbles, las finanzas y las plataformas digitales terminaron en la misma bolsa con paquetes de arroz, kilos de yerba y fideos. Y por supuesto, siempre la consabida foto posando junto a quienes se estaría ayudando, para que la beneficencia quede reflejada.

Pero el primer punto de esta «Acta compromiso» no debe pasarse por alto. Dice textual:
«Durante los primeros 5 días de cada mes los miembros deberán aportar el 5% de sus ganancias, calculadas sobre el total de los activos; sin contar el capital inicial o los ingresos posteriores de dinero».
Por una parte, hace referencia a un aporte de dinero que nunca especifica en qué se utilizará o quiénes van a usufructuar. Por otro, la firma de este acuerdo involucra tácita o explícitamente a los firmantes en un convenio donde se aceptan las reglas de juego. ¿Paraguas protector legal para los titulares de la Fundación?
Hoy el tema de la Fundación va creciendo en escándalo, salpicando a unos cuantos y dejando en pampa y la vía a muchos más. La presentación espontánea ante la Justicia de dos supuestos involucrados en la posible maniobra fraudulente abre una nuevo capítulo de un tema que se apriete donde se apriete, termina siempre saliendo pus.



