Argentina es uno de los centros dónde realizan pruebas de Fase 3 para confirmar su eficacia después de descubrir que es entre 50 y 75 veces más potente que el resto de las vacunas del mercado.
Argentina representa el mayor centro de enrolamiento del mundo en cuanto a voluntarios para probar una vacuna de origen vegetal contra el coronavirus.
Así lo destacó el Diego Wappner, director de investigación clínica de los estudios de Fase 3 en el país, en diálogo con Es por Acá.
«El estudio de Fase 2 demostró la capacidad de generar anticuerpos entre 50 y 75 veces más potente que las vacunas del mercado»,
indicó el profesional.
La novedad que presenta este estudio es que no utiliza no hay contenido genético, animal, ni conservantes.
Wapper explicó que la planta nicotiana benthamiana,«pariente lejano del tabaco», genera una proteína que permite engañar al cuerpo humano para que produzca los anticuerpos necesarios sin infectarlo.
Detrás del estudio internacional se encuentra la empresa canadiense Medicago en asociación con la británica GlaxoSmithKline. En Argentina el estudio de Fase 3 alcanza a 7 mil voluntarios distribuidos en Buenos Aires, Rosario, Córdoba y Tucumán.
La vacuna vegetal abrió camino para alcanzar a personas que muestran recelo sobre la producción tradicional y se resisten a inocularse contra el coronavirus. «Son mayormente gente joven, menor de 30 años, que lo hacen por vegetarianos o por altruismo», indicó Wapper.
Las expectativas del equipo que lleva adelante el estudio es que para octubre se logre la aprobación de emergencia de parte de la FDA en Estados Unidos y eso active la autorización de ANMAT en Argentina.
Fuente: Cba24n
