Desde 2007 Gabriela Ledesma y Franco Pereyra, dos joven con hipoacusia, forman parte indispensable del equipo que trabaja en la histórica Biblioteca Municipal Bartolomé Mitre.
Los chicos empezar a formar parte de la biblioteca a través de un proyecto impulsado por el Centro Educativo Municipal para Alumnos Sordos (CEMAS). Como así también lo hicieron otros alumnos con hipoacusia que ingresaron a trabajar la Municipalidad de la Ciudad a través de becas.
La Biblioteca Municipal Bartolomé Mitre depende de la Directora de Educación de la Municipalidad, Ana Caturelli, y del Secretario de Gobierno e Intendente electo, Marcos Torres. Allí trabaja David Asua quien nos comentó que empezar a trabajar con Franco y Gabriela requirió de gran adaptación desde ambas partes: “Fue algo nuevo, distinto. Fue empezar a ver las cosas desde una perspectiva más inclusiva. Tuvimos que aprender el lenguaje de señas con ellos”.
Aun así existía la necesidad de poder comunicarse de manera más fluida con Gabi y Franco. Por tal motivo, David y Miguel, otro de los integrantes de la biblioteca, comenzaron un curso para especializarse en el tema. Actualmente asisten al curso de Lenguaje de Señas Argentino (L.S.A) que se dicta en la Casa de la Cultura, el cual consta de dos años de aprendizaje.
El L.S.A es el medio principal de comunicación entre las personas que poseen sordera, ya sea parcial o total. En los últimos años, y gracias a la lucha de la comunidad, el lenguaje de señas recibió el respeto que se merece, la aceptación del mismo permite demostrar lo valioso que resulta para las personas sordas o con disminución auditiva.
Asimismo es muy común entre las personas oyentes que mantiene contacto con personas con hipoacusia que combinen la utilización del lenguaje de señas con la lengua oral. Como así también la utilización de la mímica, el alfabeto manual o gestos inventados para poder entenderse.
“Si a los chicos les hablas despacio y modulando, ellos te leen los labios. Se adaptan y te escuchan, es fácil comunicarse a través de las palabras básicas. Los socios de la biblioteca ya conocen a Gabriela y a Franco y saben cómo pedir lo que necesitan para que ellos los entiendan” nos comentó David.
«La sociedad se vuelve más inclusiva»
Dentro de la biblioteca, Franco y Gabriela se encargan de manejar las computadoras, cargar datos, relevar los libros que están desuso y además repararlos: “Los chicos saben mucha computación y las cosas que no saben, se las vamos enseñando”.
A través de David, quien toma el rol de traductor, los chicos nos comentaron que cada vez se sienten más incluidos dentro de la sociedad. Gabi, por su parte, forma parte de la banda de cumbia, los Chinajas Timabaleros, allí ella se desempeña tocando el güiro y bailando al compás de la música junto a sus compañeros del Hogar Crecer.
“Las psicólogas de Crecer vinieron a hablar con nosotros y nos comentaron lo bien que veían a los chicos. Los cambios son positivos y ellos sienten incluidos dentro de la biblioteca” afirmó Asua. El trabajo –en este caso en la biblioteca- ayuda a las personas hipoacúsicas con su disminución auditiva, ya que están en constante contacto con la gente y les permite, además, insertarse más fluidamente dentro de la sociedad: “Acá los chicos van a comprar a los negocios de la zona, ya todos los conocen”.
Con una gran sonrisa y mirando a Franco y a Gabriela mientras trabajaban, David nos dijo: “Son muy buenos chicos y compartir el día a día con ellos te hace ver las cosas desde otro lado. Por suerte todo está cambiando y la sociedad se vuelve más inclusiva”.
«Todos somos personas y merecemos una oportunidad»
María Elena es una marplatense que se mudó hace un año a la ciudad del Tajamar, desde su llegada se ha convertido en una asidua cliente de la biblioteca Bartolomé Mitre. Ella nos comentó que se comunica con los chicos a través de David o cuando ellos le leen los labios.
“No se lenguaje de señas pero pienso que todos deberíamos tener un conocimiento básico. Sin embargo debo confesar que me siento muy haragana en tema. Varias veces me han ofrecido aprender las señas básicas del LSA, yo las miraba y las estudiaba pero al no tener practica me las olvidaba.”
“Me parece fantástico que cada vez se integren más y más a las personas que tienen alguna discapacidad, todos somos personas y merecemos una oportunidad” finalizó contando María Elena.
¿Qué es la hipoacusia?
La hipoacusia es una disminución de la sensibilidad auditiva que afecta al oído. Puede presentarse de manera unilateral, cuando afecta un solo oído, o bilateral, en caso de que afecte ambos.
La pérdida de audición puede manifestarse en distintos grados y niveles. Esto significa que la hipoacusia es una condición más compleja de lo que generalmente pensamos.
La disminución auditiva puede presentarse en cualquier etapa de la vida, ya que las causas son muy variadas. Existen tanto factores genéticos, como adquiridos, que pueden contribuir a la pérdida de la audición en distintos tipos.
