Cartagena de Indias es una de las ciudades más turísticas de Colombia. Famosa por la Ciudad amurallada, El Castillo de San Felipe, su arquitectura colonial, el encanto pintoresco de sus calles, su variada oferta gastronómica y la belleza única de las playas en Islas del Rosario; promete ser un destino turístico inolvidable para sus visitantes.
Y es que caminar a lo largo de las Murallas de Cartagena de Indias, te lleva a imaginar lo que pudo ocurrir en el siglo XVIII, con las luchas e invasiones piratas de la época. Aquella noche la mar estaba embravecida, molesta, inquieta; como si algo le incomodara y no le dejara conciliar ese sueño profundo bajo la luz de la luna. Y es que llevaba el peso de más de 23 mil hombres y una flota de 180 naves comandadas por el inglés Edward Vernon, cuyo único objetivo era invadir y conquistar la ciudad.
La mar presagió la batalla, pero el miedo no le acompañó. Aunque el cordón amurallado aún no estaba terminado, la valentía y determinación de 5 mil hombres y 6 naves que defendían la corona; bastó para resistir el peso de la sangrienta batalla. La heroica victoria se puso sobre sus rostros salpicados por la sangre de sus enemigos. A partir de aquel día los ingleses y el mundo entero, verían ante sus ojos el nacimiento de la ciudad amurallada, el nacimiento de la heroica. Bien vale contratar a un guía local en el centro de la ciudad, quien, con su inteligencia, versatilidad y peculiar acento, contará con lujo de detalles la historia de “La heroica”
El Castillo de San Felipe también forma parte de los fortines construidos por los españoles para defender la ciudad. Fue declarado patrimonio histórico de la Humanidad por la Unesco en 1984, junto al centro histórico de Cartagena. Además, es una de las piezas más importantes de la arquitectura militar española en América.
Ubicado sobre el cerro San Lázaro fuera de las murallas, se construyó con el objetivo de poder observar y anticiparse con mayor rapidez, a las continuas invasiones y ataques que sufría la ciudad a manos de ejércitos y piratas ingleses y franceses. El Teniente General Blas de Lezo, un hombre manco, cojo y tuerto a causa de sus heridas de guerra; sería uno de los héroes que humillaría a los ingleses al derrotarlos en Cartagena.
Una estatua del militar fue erigida en la plaza frente al castillo de San Felipe, el 5 de noviembre de 2009 con una placa que reza: “Aquí España derrotó a Inglaterra y sus colonias. Cartagena de Indias, marzo de 1741”
Qué hacer y qué comer en Cartagena
Mucho podríamos escribir acerca de la rica y variada historia de la heroica, sin embargo, no podemos descuidar el estómago. Escuchar acerca de guerras e invasiones da hambre. El desayuno en el hotel con total certeza estará acompañado de cereal con yogurt, jugo de naranja y una porción de fruta; que, a su vez, puede tener: mango, papaya, melón, naranja o banana (dependiendo de los gustos)
El siguiente plato en el desayuno puede tener un par de patacones, trozos de queso costeño y un huevo frito. Otra opción puede ser un omelette con tostadas y mermelada. Las tostadas y los patacones pueden ser reemplazadas por la tradicional arepa o la “arepa e huevo” (dependiendo el lugar). Todo acompañado de café con leche o café negro. Mate no vas a encontrar por ningún lado a no ser que lo lleves en el equipaje. Pero probar lo nuevo es la mejor opción.
Belleza arquitectónica 
Calles pintorescas
Dar un paseo caminando por el casco histórico es la mejor manera de impregnarse más de la ciudad y su cultura. Hermosas puertas de madera con adornos de flores naturales, fachadas de colores como si estuviésemos en Cuba, balcones que sobresalen por doquier, calles estrechas pero amables, completan el pintoresco cuadro.
La calidez de las personas no se hará esperar. Una sonrisa, un saludo y hasta un rap improvisado de los lugareños, te introducirá en la magia de la ciudad mientras te ofrecen un mango biche, una cocada o un salpicón.
En tema hotelero si estás pensando en un rango medio de presupuesto; puedes optar por la cadena de Hoteles Cartagena Royal Inn o el Hotel San Pedro, entre otros. Los dos lugares cuentan con Jacuzzi, bar, una terraza con una hermosa vista y una agradable pileta en el caso del Hotel San Pedro.
Pero sigamos con el tema gastronómico que nos atrae más. Si quieres comer fritos y probar la «Arepa e huevo y la carimañola», hay que ir a Donde Magola, un local que desde 1999 se ha posicionado en la ciudad como un lugar de paso obligatorio, para disfrutar de las empanadas con huevo, las arepas con carne desmechada, un bollo de yuca (carimañola) relleno con carne molida y toda una variedad de delicias fritas.
Paseo por el barrio
Cada rincón en Cartagena respira historia. En el Barrio San Diego por ejemplo encontrarás el Baluarte San Pedro Mártir, también llamado Baluarte San Pedro de Verona, el cual hace parte de las construcciones fortín de la corona española. Cuenta con 12 cañones de artillería y es un punto inicial o final en el recorrido turístico de la ciudad amurallada.
El cabrero es uno de los barrios más tradicionales, turísticos y exclusivos de Cartagena. Hoteles, casas coloniales y edificios modernos se entremezclan en una atmósfera de paz, reposo o tranquilidad inigualables. Su cercanía a las playas de la ciudad, hacen que las olas del Mar Caribe golpeen los espolones seduciendo por doquier con el sonido del mar, y refrescando con su brisa a los transeúntes y aquellos que reposan en los balcones de los hoteles, con un Whisky en las rocas o una bebida refrescante en sus manos.
En este sector también encontrarás el Museo Rafael Núñez (Quien fuere Presidente colombiano en cuatro oportunidades entre 1880 y 1894), un lugar para dar una mirada de época y conocer un poco de la vida y obra literaria de este político, escritor y militar cartagenero.
Para los que aman el ejercitarse un poco o simplemente sentarse sobre la hierba, pueden visitar el Parque Apolo, uno de los símbolos del Barrio El cabrero. Allí podrán respirar aire puro, disfrutar del olor de los almendros y contemplar la laguna que hay en el lugar. También encontrarán La Ermita del cabrero, una parroquia ubicada dentro del parque.
En el Baluarte de San Francisco, calle San Juan de Dios, se celebra cada año en el mes de marzo, El Festival Internacional de cine de Cartagena, el encuentro cinematográfico más antiguo de Latinoamérica. Un espacio para promover la industria audiovisual a lo largo y ancho de toda la ciudad.
Obvio…Las playas
Cuando hablamos de playas y tratándose de Cartagena, en lo personal recomiendo ir a las Playas de Islas del Rosario. Para llegar a estas paradisiacas Islas puedes hacerlo en lancha desde el Muelle de la Bodeguita, en Cartagena. La lancha hará un trayecto inicial de 20 minutos hasta Barú y luego continuará 20 minutos más hasta Isla Grande. También se puede contratar una excursión organizada a alguna isla privada, de las 27 Islas que conforman Parque Nacional Natural Islas Corales del Rosario y San Bernardo.
Estamos hablando de islas con arena casi blanca, aguas cristalinas y tibias en donde se puede nadar o hacer snorkel tranquilamente. Ahora, si prefieres ahorrar dinero a cambio de un poco de bullicio con vendedores ambulantes en la playa, motos acuáticas pasando muy cerca de ti cuando quieres nadar un poco, o la oferta interminable de masajes, puedes quedarte en Barú o en las playas mismas de la Ciudad de Cartagena.
Hay una variada oferta de hoteles y restaurantes en Islas del Rosario. Si te gusta el pescado no dejes de pedir una mojarra frita con patacones, ensalada y arroz con coco. Si te gustan los mariscos, te recomiendo jamás comprarlos en la playa, siempre en un restaurante y si es recomendado, mucho mejor. La comida de mar va muy bien con una cerveza bien fría. El postre puede consumirse en la playa, pues las cocadas (delicias a base de coco) que venden las Palenqueras (mujeres negras vestidas con ropas de colores, oriundas de San Basilio de Palenque), son imperdibles. ¡Salud y buen provecho!
